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El ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, concurrió ayer durante casi dos horas a una reunión reservada con diputados de todo el arco parlamentario para informarles sobre la marcha del plan de seguridad y responder cuestionamientos de los legisladores especialmente sobre los ataques a casas que ocuparon magistrados penales en Rosario.
“Siempre es importante tener reuniones con los representantes del pueblo; con gusto venimos a Legislatura para dialogar, a tomar diferentes visiones” dijo Pullaro al retirarse. “Deberían ser más continuas para evaluar un tema como la seguridad que es el de mayor preocupación para los santafesinos” señaló el justicialista Roberto Mirabella.
Sobre los ataques a las casas de los magistrados, Pullaro pidió excusarse de dar detalles de la investigación que lleva adelante la fiscal Natalia Benvenutto con apoyo de las fuerzas provinciales y federales. Germán Mastrocola (Cambiemos) confió en que el ministro reveló que está muy avanzada la investigación por los ataques a inmuebles donde vivió el juez Ismael Manfrín.
De todas maneras, Pullaro elevó sus quejas al Poder Judicial por la calificación preliminar que hacen ante detenciones de personas que disparan armas de fuego. “En Rosario, en los últimos cuatro meses, la policía detuvo a 64 personas por disparos de armas de fuego contra domicilios. Tenemos que discutir cuál es el delito que se le imputan a un hecho de estas características. A nuestro criterio, debería ser tentativa de homicidio. Una persona que dispara sobre una vivienda particular donde hay personas adentro no quiere amedrentar o amenazar, quiere matar, entonces el delito debe ser tentativa de homicidio. Veíamos en los diferentes partes de detenciones, con secuestros de armas, que el delito que se les imputa es abuso de arma de fuego y en otros amenazas, con penas de 6 meses a un año o de uno a tres. Son todos delitos excarcelables cuando para nosotros es un delito grave y lo compartimos con los legisladores. No es que no se detiene a nadie, se los detiene y la mayoría- salvo con casos pendientes en la justicia- quedan en libertad”, se quejó. El ministro reconoció que habló el tema con el Poder Judicial pero que hasta el momento no ha tenido respuesta favorable y pidió apoyo legislativo para esta discusión.
Mastrocola -uno de los autores del pedido de presencia del ministro- señaló que Pullaro presentó cuadros con descenso de homicidios en la ciudad de Santa Fe y discreparon sobre los alcances de la encuesta del Ministerio de Seguridad de la Nación que señala que los santafesinos mayoritariamente no denuncian delitos contra la propiedad. “Sí nos admitió que la gente no confía en la policía” señaló el macrista al retirarse de la Cámara.
Mirabella centró su preocupación por el funcionamiento de la central de investigación criminal operativa, el OJO. El rafaelino preguntó si estaba en funcionamiento y que había pasado con la contratación del software que puede predecir futuras situaciones delictivas. “Hace más de un año que la central está en funcionamiento pero no se pudo comprar el software, hubo dos licitaciones declaradas desiertas. Más allá de los anuncios, esto no está funcionando” aseguró. “No funciona en los términos que el gobierno anunció” insistió Mirabella quien comentó que Pullaro los invitó a visitar el centro de funcionamiento en la ciudad de Rosario.