Ivana Fux | [email protected]
El presidente del partido, Ricardo Olivera, admitió la “intranquilidad” que se vive internamente en la fuerza. “Es muy difícil comenzar a trabajar en un proyecto como ése con esta incertidumbre”, advirtió.
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El temor a una eventual intervención en el Partido Justicialista provincial obligó a cambiar el eje de la reunión de su Consejo Ejecutivo. Originalmente en el encuentro previsto para hoy, se había agendado como tema prioritario comenzar a debatir el proyecto de reforma constitucional, y convocar al Congreso partidario para fijar una postura institucional sobre el tema. Pero la situación derivada de la intervención a la fuerza a nivel nacional y la preocupación porque ello pueda replicarse a nivel local, forzó un cambio de planes. “Estamos intranquilos”, admitió el presidente del PJ, Ricardo Olivera, consultado por El Litoral.
- ¿Puede ser intervenido el PJ de Santa Fe?
- De acuerdo a lo que uno está viendo a nivel nacional todo es posible porque la intervención, no sólo en Santa Fe sino en cualquier distrito, es una decisión del interventor; ya ni siquiera se requiere el tema de la justicia. Nosotros vamos a definir alguna estrategia; estamos en contacto con provincia de Buenos Aires donde también el martes hay una reunión por este motivo. Estamos intranquilos porque puede ocurrir. El eje hoy de esta convocatoria fue ver los pasos a seguir y qué es lo que podemos hacer ante esta cuestión que no es segura, pero también dos días antes de que interviniesen el PJ nacional decíamos que no era posible, y a las 48 horas se intervino con una serie de argumentos que tienen un contenido político. Y si eso se quiere replicar, también se puede hacer acá.
- ¿Santa Fe tiene su situación administrativa ordenada?
- Totalmente ordenada. Desde nuestra gestión tenemos los balances presentados en tiempo y forma; las rendiciones de la campaña electoral ya fueron aprobadas, los sueldos están al día, y las regularizaciones de deuda que teníamos con AFIP la estamos cumpliendo con mucho sacrificio. Desde ese punto de vista no hay ningún motivo para intervenir.
- ¿La discusión sobre la reforma hoy en el PJ pasó entonces a un segundo plano? -consultó otro colega-
- Sí, ni siquiera se trató. Una intervención cambia el escenario. Acompañé mucho la gestión de José Luis Gioja que priorizó siempre el diálogo con todos los espacios; esto creo que es lo que ha molestado. En Santa Fe muchos me dicen ‘porqué la intervención si aquí fuimos todos juntos’ (en la última elección). Y es muy probable que ése sea el argumento para poder intervenir. Si habría una dificultad se podría poner hasta un veedor. Pero nuestra preocupación es política. Es muy difícil comenzar a trabajar en un proyecto como la reforma constitucional con esta incertidumbre.
- ¿Cuando Barrionuevo dice que de esa conducción saldrá la fórmula de 2019, ello desnuda que hay un interés político detrás de la intervención?
- Y... Yo para decir eso es porque tengo casi la seguridad de que la justicia va a mantener esta situación, porque si la justicia como nosotros pensábamos resolvía esto a favor de la actual gestión en un par de meses, nos quedábamos más tranquilos. Pero después de escuchar eso, concluyo en que su intención (la de Barrionuevo) es quedarse para definir la estrategia electoral nacional de 2019. Y los tres distritos que somos importantes para ello (Capital, Buenos Aires y Santa Fe) estamos en la mira.
- ¿Un interventor podría definir una postura sobre temas sensibles como la reforma, más allá de lo que digan sus legisladores?
- Y sí. En una elección de convencionales, la lista la hace el interventor. El año que viene, en la elección de diputados nacionales, (la lista) la va a hacer también el interventor.