Agencia Reconquista
El intendente Dionisio Scarpín remitió una nota firmada de puño y letra al gobernador Antonio Bonfatti y a sus ministros para “ponerlo en conocimiento respecto a la compleja situación que está atravesando el Distrito Avellaneda a causa de la emergencia hídrica” que se presenta en todo el territorio del departamento General Obligado producto de las inclemencias climáticas.
El funcionario municipal alertó en la misiva a la máxima autoridad política provincial que “la gravedad de la situación actual tiene su origen en las frecuentes y altas precipitaciones registradas en los últimos 50 días que ascienden a 953 mm, considerando que la media anual de nuestra zona es de 1200 mm”, lo que ha generado “consecuencias dramáticas desde el punto de vista social, económico e infraestructural”, que afecta a toda nuestra vasta zona rural en general y en algunos sectores del área urbana.
Como consecuencia - se explayó Scarpín - se han producido, por un lado, anegamientos en viviendas familiares de sectores con alta vulnerabilidad social, que han debido ser evacuados, con “pérdidas patrimoniales y económicas importantes”: y por otra parte, la mayor parte del área rural de Avellaneda cuenta con caminos de piso natural que han quedado “anegados e intransitables durante muchas semanas, con deterioros y rupturas que afectan la movilidad. Se han visto obstruidas además las principales vías de desagüe y drenaje pluvial”.
De manera análoga, las dos rutas provinciales que atraviesan el Distrito Avellaneda RP Nº 31 y RP Nº 98, la primera de calzada pavimentada y la segunda con sectores de estabilizado granular y piso natural, “han sufrido grandes daños y requieren de recuperación inmediata, por ser arterias nucleares para la dinámica socioeconómica del territorio”, puntualizó el jefe municipal.
Graves consecuencias
En tal sentido, precisó que “el sector agropecuario, principal sector económico del distrito, ha sufrido enormes pérdidas en un periodo agrícola clave, generando graves consecuencias que se vuelcan hacia el resto de los sectores de la economía local. Los principales cultivos, girasol y soja, se han visto notablemente afectados”.
Sobre este punto, enumeró que el girasol, por un fuerte granizo acaecido en el mes de octubre, que ha afectado en forma irregular distintos lotes, seguido posteriormente a las incesantes lluvias y a los 525 mm caídos en el mes de diciembre (frente a una media histórica para dicho mes de 139 mm), lo desembocó en ue más del 30% de la superficie sembrada no haya podido ser cosechada y los rindes obtenidos estén muy por debajo del promedio, alcanzando los 1.200 kg/ha.
Respecto a la siembra de soja, Scarpín mencionó en la nota que presenta un avance que no supera el 50%, con implantaciones muy irregulares. Se registra a esta altura, un notable atraso respecto el momento óptimo de siembra (desde mediados de noviembre a mediados del mes de diciembre), con pérdidas en la calidad de semilla, del barbecho y la presencia de malezas y orugas, lo que “generará consecuencias muy negativas en la rentabilidad de los productores”.
Al mismo tiempo, puso de relieve que similar situación se observa en las denominadas siembras de tercera, es decir, la implantación de maíz y sorgo tras el cultivo de girasol, ya que continúan siendo “poco alentadoras las perspectivas meteorológicas para los próximos meses, con consecuencias similares a la anterior para márgenes de rentabilidad tradicionalmente muy bajos”.
“La situación descripta genera enorme preocupación e incertidumbre en los más de 200 pequeños y medianos productores agropecuarios de nuestro distrito y en las principales empresas e instituciones ligadas al sector”, expuso.
Por tal motivo, en su carácter de intendente de Avellaneda solicitó al gobernador que “ponga a disposición recursos económicos que nos permitan brindar asistencia a las familias damnificadas, recomponer la infraestructura vial y otorgar ayudas a pequeños productores agropecuarios de nuestro Distrito”. Asimismo rogó destinar maquinarias y equipamiento para reparar los desagües urbanos y rurales a fin de menguar esta situación y evitar futuros desastres.
Cuadro social
Asimismo, en otra nota dirigida a la ministra de Desarrollo Social. Mónica Bifarello, el titular municipal le informó que “se han producido, por un lado, anegamientos en viviendas familiares de sectores con alta vulnerabilidad social, que han debido ser evacuados, con pérdidas patrimoniales y económicas importantes”.
Como consecuecia de ese cuadro, las jefas y jefes de familias de estos grupos quedaron afectados laboral y económicamente, debido a que la mayoría realizan trabajos eventuales y relacionados a la albañilería, pintura de casas, trabajos rurales, de jardinería, etc., agregó Scarpín, quien señaló que “las permanentes lluvias y la alta humedad, seguidos por bruscos cambios de temperatura, han generado problemas de salud en niñas/os y adolescentes, debido fundamentalmente al agua y humedad que se filtran en paredes y techos, generando incluso riesgos futuros”.
Ante la situación social descripta, demandó recursos económicos por .000 con el fin de destinarlos a reforzar las tareas de asistencia a las familias damnificadas, y menguar esta situación, minimizar los daños ocurridos y evitar futuros desastres de continuarse las inclemencias climáticas reinantes.
Familias anegadas
Las familias mayormente afectadas en la zona rural del Distrito Avellaneda son de los parajes rurales Avellaneda Oeste (36), La Colmena (12) y El Timbó (4). En lo que respecta al área urbana, son 150 las familias que habitan en el sector sureste de Barrio Port Arthur, Belgrano, Cooperación (zona Oeste) y Don Pedro, que sufrieron el ingreso de agua en sus casas y debieron ser evacuadas.