En un juicio abreviado, un hombre que ahora tiene 51 años fue condenado en la ciudad misionera de Eldorado a 14 años y medio de prisión por abusar sexualmente de su hijastra adolescente. A causa de esos ataques sexuales, la chica fue madre a los 14.
El hecho fue denunciado en 2011, pero el ahora condenado se mantuvo prófugo durante mucho tiempo.
En un juicio abreviado, un hombre que ahora tiene 51 años fue condenado en la ciudad misionera de Eldorado a 14 años y medio de prisión por abusar sexualmente de su hijastra adolescente. A causa de esos ataques sexuales, la chica fue madre a los 14.
El hecho fue denunciado en 2011, pero el ahora condenado se mantuvo prófugo durante mucho tiempo. Ante la contundencia de las pruebas, acordó una pena con el fiscal del Tribunal Penal de Eldorado, Federico Rodríguez, tras admitir su culpabilidad.
De acuerdo con la investigación judicial, la nena comenzó a ser abusada cuando tenía 11 años y esos ataques cesaron en 2014 cuando su madre descubrió lo que ella ocultó durante todo ese tiempo por miedo.
Para ese entonces, la adolescente ya cursaba un embarazo y finalmente fue madre de una beba mientras el abusador se mantenía prófugo.
Fuentes vinculadas a la causa señalaron que el hombre siempre buscaba quedarse solo en la casa junto a su hijastra y el hijo en común que había tenido con su pareja. Incluso había rechazado la posibilidad de contratar a una niñera para que se hiciera cargo del cuidado de los menores.
La mujer descubrió casi de casualidad el calvario que vivía su hija. Fue en febrero de 2011, cuando se equivocó el día que debía ir a una consulta médica en Eldorado. Fue por eso que retornó mucho antes a su casa del Kilómetro 1 de Eldorado y sorprendió a su pareja abusando de la adolescente.
En su declaración ante la Justicia, la chica contó que primero fue sometida a manoseos y luego violada por la pareja de su madre. El hombre la obligaba a guardar silencio bajo amenaza de matarla junto a su hermanito menor y su madre si revelaba algo sobre los abusos.
El ahora condenado incluso le exhibía a la adolescente películas pornográficas y llegó a abusar de ella mientras su hermanito dormía en una cama contigua, en la misma habitación.
El abusador fue capturado muchos años después, cuando regresó a Eldorado, convencido de que ya nadie lo buscaría para rendir cuentas ante la Justicia.
El hombre zafó así de enfrentar un juicio oral por los delitos de abuso sexual simple y con acceso carnal calificados por ser el encargado de la guarda, y cometido contra una menor de 18 años, aprovechando la situación de convivencia, además de promoción de la corrupción de menores doblemente agravado.