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Los denominados “soldaditos”, cobraban abajo y desde la parte superior de la casa bajaban la droga. Era una medida de seguridad.
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Agentes de Gendarmería Nacional pusieron fin a la actividad de una pareja de delincuentes, los que se dedicaban a la comercialización de drogas.
Todo comenzó cuando los investigadores, en el marco de la lucha contra el narcotráfico llevado adelante por el Ministerio de Seguridad de la Nación, detectaron movimientos sospechosos por parte de una mujer.
Lo que siguió fue la detención de la implicada. A partir de entonces se ordenaron una serie de seguimientos y vigilancias disimuladas, las que derivaron en cuatro allanamientos realizados en Villa Gobernador Gálvez y en Rosario.
Al ingresar a los domicilios, los uniformados constataron cómo actuaban desde el techo de una vivienda ubicada en Villa Gobernador Gálvez, para fraccionar y comercializar estupefaciente.
Allí encontraron 140 dosis con un total de 188,8 gramos de cocaína, balas calibre 38 y calibre 45, 4.690 pesos en efectivo, aparatos de telefonía celular y otros elementos.
Se determinó además que desde el techo de uno de estos inmuebles (en rigor, uno de los denominados “búnker”), se ofrecían dosis de droga a ocasionales clientes.
Para concretar sus “operaciones” estos narcos se valían de los llamados “soldaditos”, quienes cobraban abajo y desde la parte superior de la casa bajaban la droga.
Se determinó que esta modalidad había sido impuesta como una medida de seguridad.
Intervino el Juzgado Federal N° 4 de Rosario, que determinó el decomiso de la droga y la detención de los ciudadanos implicados.