Darío Pignata
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Admite que lo sorprendió el llamado del ahora presidente Enrique Ariotti en la medianoche del domingo.

Darío Pignata
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La primera vez que Ricardo Johansen pisó Santa Fe como para quedarse a laburar profesionalmente se le cayó todo como un castillo de naipes: es que ese zaguero de Newell’s que había ido a préstamo hacia Almirante Brown era “comprado” directamente por Unión, por pedido de Hilario Bravi y casi no jugó. Era el símbolo en La Fragata, no faltaba nunca. Por eso aquella tapa de la desaparecida revista “Sólo Fútbol” que titulaba: “Los Sarmiento del Fútbol” y lo tenía a Ricardo Johansen (Almirante Brown) de un lado y a Pedro Catalano (arquero eterno del Deportivo Español) del otro.
Ese jugador que no faltaba nunca y llegó a la marca imbatible de 196 partidos seguidos, llegó como refuerzo a Unión en 1993 y sólo pudo jugar seis partidos. Se rompió feo los cruzados y ese fue su retiro del fútbol profesional.
“Cuando fui de Newell’s para Almirante Brown me jodí feo y después cuando me compró Unión, lo mismo. ¿Qué me acuerdo?: que sólo hice un gol con la camiseta de Unión, de cabeza a Atlético Tucumán. En total, tengo ocho operaciones, me pasó de todo”, recuerda hoy quien será el DT de Colón en el clásico ante Unión este sábado a las 14.
Cuando pasa de Newell’s a Almirante Brown nunca pensó que quedaría en la historia como “El Gran Capitán”, junto a recordados nombres en Isidro Casanova como Pastor, Martini, Godoy, Golinowski y el “Pitufo” Grioni, entre otros.
“Lo único que nos faltó fue ascender, no se nos dio, no pudo ser”, se lamenta hoy a pesar de los muchos años que pasaron. Llegó a jugar 196 partidos de manera ininterrumpida con la camiseta de Almirante Brown y está instalado como el cuarto jugador que más veces usó la amarilla con negro a rayitas con 252 partidos.
—¿Quién te trae a Colón la primera vez, Ricardo?
—Yo vengo con “Boquita” Sensini, pero en realidad por aquellos tiempos el que me busca es Gabriel Omar Batistuta. Se hizo un trabajo muy bueno y no lo digo por el hecho que salimos campeones de AFA en reserva. Lo digo por esa camada de jugadores que fue espectacular, donde jugaron entre otros Lucas Alario (hoy en River), Marcelo Meli (hoy en Boca) o el caso de Germán Conti, a quien yo decidí subir de la quinta de la AFA a ese equipo de reserva porque ya estaban claras sus condiciones. Ni qué hablar de Poblete. Me acuerdo de Mehring y Lovera, los arqueros; también de Bailo. De Castillo, Cuevas, Saín, Sandrigo, Bellone, Leys, Jourdan, Callejo. Y hasta Villarruel. La alegría es saber qué varios llegaron.
—Pocos se acuerdan de Meli...
—Me debe una Marcelo (se ríe), aunque sea la camiseta de Boca. Cuando yo llego lo querían prestar a otro club, porque decían que no pasaba nada y mirá dónde terminó.
—¿Y Alario?
—De entrada te dabas cuenta de que era muy difícil que no llegara. Su gesto técnico del cabezazo es algo impresionante.
“Me trae Ariotti a Colón”
Ahora, Ricardo Johansen quiere que “segundas partes sean buenas o mejores”. Por eso está de vuelta en Colón. Y las vueltas del fútbol lo pondrán al frente del plantel profesional en estas fechas finales.
Si bien es nacido en Bustinza un 12 de febrero de 1962, se lo referencia con Rosario. El domingo a la noche, cuando sonó el celular después del adiós de Franco, estaba en Córdoba visitando familiares.
—¿Quién te trae para esta nueva etapa tuya en Colón?
—A mí me habla Enrique Ariotti, antes de las elecciones. “Si nosotros ganamos, quiero que vuelvas a Colón, porque todo el mundo habla muy bien de tu trabajo anterior”, me dijo. La verdad, cumplió en todo con su palabra: ganó las elecciones y al otro día me contrató. Nunca dudé en volver a Colón.
—¿Qué pensaste cuando te llamó el domingo?
—Me sorprendió, la verdad. Si bien esto es fútbol y todo puede pasar, Colón había jugado el viernes a la noche y se venía el clásico con Unión. La primera sensación fue de sorpresa.
—¿En algún momento dudaste en dar el sí?
—No, pero no por el cargo en sí de entrenador profesional, sino porque siento la necesidad de colaborar y ayudar a Colón. Que un club se quede sin técnico a cinco días de un partido, no es cosa de todos los días. Y que ese mismo club tenga que jugar un clásico en condición de visitante, agrava la situación, por los corto de los tiempos.
—¿Encontraste un plantel golpeado ayer en la primera charla por lo que pasó con Darío Franco?
—Sí, en realidad encontré un grupo de jugadores que no está conforme y que quieren y puedan dar más por la camiseta de Colón. En cuanto a lo otro, es lo común de este juego cuando las cosas no salen como una de las partes pretende.
—¿Venís con un esqueleto táctico definido en tu cabeza?
—Imposible, porque hay que acomodarse a los jugadores que tiene este plantel cuando se formó. No creo que podamos entrenar por las condiciones del tiempo, las canchas de Colón están inundadas. Es poco lo que se puede hacer, ojalá pueda entrenar al menos una vez al aire libre, en una cancha seca.
—Cuando en cualquier club toma el DT de la reserva el equipo de Primera, los jugadores de inferiores se ilusionan. ¿Es momento ahora de poner pibes?
—Es muy buena la pregunta.
—Es que si no parece que nunca es el momento de los pibes.
—El momento de los pibes no tiene que ver, necesariamente, con el momento del equipo. Cuando el chico está preparado y listo, uno se da cuenta sin dudar.
Lo conozco a Víctor Figueroa de su paso por Newell’s donde estuve, tengo amigos, conocidos. Se lo dije a los jugadores, no voy a hacer ninguna referencia a lo que hizo Darío con el plantel. No voy a mirar para atrás. Para mí Víctor se siente cómodo jugando suelto, de enganche, sin obligaciones de retroceso y arrancando con dos puntas adelante de su posición para abastecerlos”. Ricardo Johansen. DT de Colón.
¿Qué puedo decir o agregar yo de Alan Ruiz que la gente y el periodismo no sepan de este momento suyo en Colón. Sin dudas que mostró un arranque espectacular y por eso viene un club de Europa para comprarlo en una cifra millonaria. Es distinto, desequilibrante, creo que puede jugar de enganche, de mediapunta o hasta de punta rotando por todo el frente de ataque”. Ricardo Johansen. DT de Colón