El Litoral
“Si está bien, va a jugar; y si no está bien, yo sé a quién pondré pero no lo voy a decir. No le voy a ir a golpear la puerta a Forestello para decirle quién jugará, que lo averigue él”, dijo el técnico sabalero.
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No tiene fin la cadena de lesiones que sufre el plantel de Colón. Se suma nuevamente el Pulga Rodríguez, quien se quedó afuera en un par de partidos y luego fue titular en la seguidilla que arrancó en Mar del Plata (ante Aldosivi), siguió en Perú (ante Deportivo Municipal) y finalizó en Santa Fe (contra San Lorenzo). El Pulga, un jugador clave en el aspecto ofensivo del equipo de Lavallén, sintió una dolencia muscular que no le impide entrenarse pero que sí le provoca dolores y no lo deja patear. Por eso, a esta altura de la semana —el partido es el lunes que viene— hay más chances de que no juegue a que sea de la partida.
Por tal motivo, Lavallén —que tiene previsto hacer este viernes una práctica intensa de fútbol— tendrá que ir pensando en un eventual reemplazante, con el agravante de que todavía no está en condiciones Wilson Morelo. Por eso, para recibir a San Martín de San Juan —equipo seriamente amenazado por el descenso— hay ausencias que son notorias, sobre todo en lo que se refiere a uno de los déficit que tiene el plantel: la parte ofensiva.
Lavallén dijo este jueves al mediodía que “no hay definido” y que la decisión final la tomará “junto con el jugador”, por lo cuál no lo descarta. Pero la lesión existe y pone en riesgo la particpación del delantero.
“Estuve focalizado en algunos puntos y contra los sanjuaninos, los jugadores tendrán un poquito más de conocimiento de lo que pretendemos. La idea no estará desarrollada, para eso necesitamos cinco o seis entrenamientos de repetición. Y eso es imposible de lograr en una semana”, dijo Lavallén.
En cuanto a Fritzler, dijo que “todavía no tuvo fricción, recién le está pegando a la pelota, para este partido no estará en consideración pero apuntamos al partido con Gimnasia”. Sobre Esparza, dijo que “está bien y entrenando con normalidad, a disposición del cuerpo técnico”.
Sobre el rival, dijo que “pensamos en Colón y no en las urgencias de San Martín” y dijo que “en principio se había resuelto que el partido de Copa Argentina iba a ser después de Gimnasia, pero ahora se prolongó para más adelante. Eso nos viene bien, porque entre el partido en La Plata y el primer partido de la Copa de la Superliga tendremos una semana larga”, dejando entrever que el encuentro con Gimnasia podría ser el viernes de la semana que viene. Respecto de la Copa Argentina, donde el rival será Acasusso, lo más probable es que se juegue a fines de abril.
Respecto del partido, no dio señales de cómo formará. “Lo ideal es que uno pueda tener un plantel de 25 jugadores en el que todos sepan lo que uno quiere, cosa que el que juegue no haga resentir la idea. Eso será para más adelante”, dijo Lavallén, aunque dejó una sentencia: “Hoy, lo mejor es no cambiar tanto”, por lo que no habría muchos cambios en función de los 11 que arrancaron con San Lorenzo.
“Sea el partido que sea, la búsqueda es salir a ganar. Si podemos conseguir los seis puntos en estos dos, que faltan, sería bueno para ganar confianza y un ambiente de trabajo de mejor ánimo”, señaló Lavallén.
Por último, aclaró que “si no puede jugar el Pulga, tengo bien claro quién puede jugar pero no lo voy a decir. Si el Pulga está bien, jugará él. Si no está bien, que Forestello se preocupe por saber a quién voy a poner y no que sea yo el que le toque la puerta y le diga a quién pondré”.
Gelabert está lesionado
Sin margen de error, San Martín de San Juan se prepara intensamente para vivir un choque trascendental. El lunes se juega mucho más que tres puntos, ya que su permanencia en el círculo máximo del fútbol argentino dependen mucho de lo que suceda en Santa Fe.
El partido se jugará con los resultados de los rivales sanjuaninos en la lucha por el descenso, ya conocidos. Pero sea cual sea el final de Belgrano, Tigre y Patronato, debe salir a ganar, para llegar a la última jornada, con Talleres, con las mejores chances de mantenerse en la divisional.
Por estas horas, la mayor preocupación por saber si llegará al lunes pasa por el volante Marcos Gelabert. Es un jugador clave y uno de los más experimentados en el grupo que dirige Forestello. El “Pampa” terminó el partido con Dálmine, la semana pasada por Copa Argentina, con un fuerte golpe en la rodilla, la que se operó hace un tiempo. Tiene líquido en la zona y por el momento no está confirmado que llegue. Al ser una pieza clave, no deja de ser un dolor de cabeza para el DT.
En cuanto al resto, Dening superó el traumatismo de columna agudo y esta semana se sumó a entrenar con normalidad junto a sus compañeros.