La danza de nombres comenzó y en algunos casos, al menos por los entrenadores ofrecidos, parece no tener fin en Unión. El más firme es el de Cuffaro Russo, porque tiene experiencia, se valora el trabajo con juveniles que hizo en Jujuy cuando ascendió y se adapta al famoso rubro de “manejo de grupo” que se busca para el vestuario. En su grupo de trabajo aparecen los ex futbolistas José Chamot y “Polillita” Da Silva.
El otro nombre es el de Claudio Vivas, de quien se recibieron las mejores referencias, porque si bien no arrancó con buenos resultados, se le elogia el manejo del plantel.
En las últimas horas, los dirigentes le ofrecieron el retorno a un Claudio Gugnali que agradeció el llamado, está muy cómodo en Estudiantes y además nunca aceptaría ir a un lugar donde está “su amigo” Sergio “Corcho” Lerman.