De acuerdo con el entorno del ex goleador rojiblanco, Claudio Guerra, el mismo futbolista admitió que “quiere volver a ponerse la camiseta de Unión, porque no le gustó la forma en que se despidió y busca tener una revancha”.
Como se sabe, Guerra cumplió los dos préstamos reglamentarios consecutivos y a Unión no le quedaba otra que comprar el pase del delantero, cuya ficha estaba fijada en 350.000 dólares por el cincuenta por ciento.
Si la representación de Guerra cambia el pase por la deuda o consigue “sacarlo” de Huracán, los dirigentes de Unión están dispuestos a contemplar un préstamo con el visto bueno del cuerpo técnico.




