Robo de cables: ya son 5 las chatarrerías de Santa Fe en las que encontraron cobre

La Dirección de Control de la Municipalidad junto al personal de la Policía de Investigaciones (PDI) y de la Secretaría de Gestión de Registros Provinciales realizó procedimientos de inspección en dos chatarrerías ubicadas en barrio 29 de Abril y Guadalupe Oeste de la ciudad de Santa Fe.

En los operativos se halló una considerable cantidad de metales no ferrosos (cobre) que, según los informes preliminares, presentan características similares a los sustraídos a la Empresa Provincial de la Energía (EPE).

Clausura

El local ubicado en barrio Guadalupe Oeste fue clausurado por personal del municipio al constatarse actividad comercial sin autorización. En tanto, en el local de barrio 29 de Abril se corroboró que la actividad estaba habilitada pero en contravención.

Los titulares de ambos comercios quedaron demorados por disposición del fiscal. Las autoridades procedieron con la correspondiente documentación del hallazgo, y se iniciaron las investigaciones para esclarecer el origen del material y determinar responsabilidades.

Más inspecciones

En lo que va del año el municipio ya concretó cinco operativos de control en chatarrerías de la ciudad con resultados positivos. Los mismos se realizan en el marco de los robos y vandalizaciones al sistema de alumbrado público.

Durante otros operativos realizados el viernes de la semana pasada se halló una considerable cantidad de material eléctrico: cables, reflectores, objetos de alta tensión. Según los informes preliminares, lo secuestrado presenta características similares a los sustraídos recientemente en distintos espacio públicos de la ciudad, según se informó desde el Municipio.

Los procedimientos se realizaron en Bº Centenario, La Guardia y en Bajada Distéfano, este último arrojó resultados negativos. La chatarrería ubicada en B° Centenario fue clausurada por el personal municipal y su titular quedó detenido por disposición del Fiscal de justicia.

Por qué los roban

Los cables de luz se roban para vender los metales que los componen en el mercado negro, ya que tienen un alto valor. El objetivo de quienes lo roban es uno solo: quemarlos y así obtener el preciado cobre que tienen en su interior y que luego se vende en el mercado negro. Cada metro de cable de alta tensión contiene un promedio de 300 gramos de cobre que cotiza alto en el comercio espurio.

El cobre es un metal valioso que se utiliza en muchos sectores, como la fabricación de baterías, circuitos electrónicos, tuberías, transporte y monedas. La demanda de cobre ha aumentado en los últimos años. Es fácil acceder a los cables de luz. Es simple destruir el rastro de su origen. Su proceso de reutilización e introducción en el mercado es relativamente sencillo.

Prevención

Algunas de las medidas que se pueden tomar para tratar de revertir esta situación son: reforzar la vigilancia en áreas vulnerables, usar tecnologías como cámaras de seguridad y sensores de movimiento, aplicar sanciones más severas y regulaciones estrictas en centros de reciclaje, además de los mencionados allanamientos.