Concejo: áspero debate por el ingreso de personal municipal

Luciano Andreychuk
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“Y vos, ¿de qué lado estás?”. El hombre de traje gris oscuro apostado en una de las entradas al recinto bromeó sin gracia hacia el sector de los periodistas. Estaba parafraseando el slogan televisivo de uno de esos programas de entretenimientos de la tarde. Lo que en apariencia no tenía ningún sentido sintetizaba, en realidad, toda una sesión del Concejo: la pregunta llevaba a inferir que había más de un lado, y que estos lados (políticos) eran ayer opuestos, cuando no antagónicos. Afuera, en la entrada del Palacio municipal, decenas de aspirantes al ingreso al municipio formaban una larga fila. La gente necesita trabajar.

Poco antes, Héctor Acuña había sacado una enorme Biblia y leído un pasaje de San Marcos. La cita le servía para chicanear al intendente. Algo después, José Corral mencionaría a Max Weber, el sociólogo alemán del siglo XIX. Desde las Sagradas Escrituras hasta la filosofía política, la cosa se ponía interesante. El debate deliberativo había sido disparado por la convocatoria a un concurso para cubrir 60 cargos (modalidad no permanente) en atención al público abierto por la Municipalidad, las exigencias excluyentes para la inscripción y la situación de los “precarizados”. La oposición arremetió con cuatro proyectos sobre la cuestión, pero no logró que se tratara ninguno: el interbloque oficialista no acompañó las propuestas y no se reunieron los dos tercios requeridos.

Alejandra Obeid (SFF) y Roberto Campanella (PJ) proponían que se considere y priorice al personal que actualmente presta servicios en el Municipio ante una situación de paridad con nuevos aspirantes; Luciano Leiva (FPV), que no sea excluyente la acreditación de idoneidad en atención al público. Desde el bloque 100 % Santafesino, dos iniciativas de Acuña y Sergio Ferreira también versaban sobre la cuestión. “Hay agentes precarizados que desde hace años le están poniendo el hombro al Estado municipal, por 600 pesos indignos”, dijo el primero.

Jerarquizar la función pública

Las diferencias políticas entre oficialismo y oposición quedaron expresamente marcadas. Corral, presidente del Cuerpo, fue taxativo y directo: “Hay dos criterios centrales que defendemos: igualdad de oportunidad para el ingreso a la administración municipal y la elección de los mejores para cada puesto. Esto hace a una política sobre la función pública. “Ni amigos, ni parientes, ni punteros. La función pública debe ser jerarquizaba”, puso en claro.

Para Adriana Molina, también del FPCyS, “la capacitación, idoneidad y el esfuerzo son fundamentales para el ingreso a la administración pública, y garantías de más transparencia. Antes (en gestiones anteriores, se refería) muchos ingresaban por algún tipo de familiaridad con alguien, por amiguismo o hasta filiación partidaria. Hoy tenemos concursos por antecedentes y oposición”.

Ya con el consenso deliberativo caído en saco roto, la sesión pasó a otros temas. Vinieron comunicaciones y declaraciones de interés, adhesiones, no mucho más. Mientras, los aspirantes se seguían llegando al Palacio Municipal. Al final de cuentas, a la gente no le interesa otra cosa más que poder trabajar.

Del recinto

Denuncias. El Concejo pidió al gobierno provincial que sugiera al fiscal general la conformación de Agencias Fiscales Especiales, donde se recibirán denuncias de los vecinos sobre hechos delictivos. Se solicita que estas agencias funcionen en los Centros de Distrito municipales. La iniciativa, de Carlos Suárez y Jorge Henn (FPCyS).

Igualdad. Otra iniciativa aprobada -de Adriana Molina y José Corral (FPCyS)- dispone la creación de un plan municipal de igualdad de oportunidades para varones y mujeres. El objetivo: promover programas y acciones que favorezcan la igualdad de género desde distintas áreas de la administración local.