El Litoral
Fuentes policiales y el propio testimonio del involucrado explicaron que se trató de un episodio de “negligencia”.
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Si bien las primeras informaciones que circularon hablaban de que el Tren Urbano había atropellado a un peatón, horas más tarde se aclaró la situación.
Tanto las fuentes policiales consultadas por El Litoral como el propio testimonio del hombre que participó del episodio explicaron que se trató de una “negligencia” con respecto a las precauciones que se deben tener en la zona que circula la formación.
Vale destacar que minutos antes de las 20 el Tren Urbano circulaba por la zona de J. M Zuviría y Aristóbulo del Valle, esto es a pocos metros del Puente Negro, y un hombre de 48 años que estaba corriendo por el lugar golpeó la formación y terminó tirado en el piso. Servicios de emergencia lo trasladaron al Hospital José María Cullen y, al poco tiempo, recibió el alta médica con traumatismos leves.
Según comentó un lector a través del WhatsApp de El Litoral que viajaba en el Tren, en ese momento “el maquinista tocó bocina pero de igual modo este hombre golpeó a la formación y se cayó para el lado de la bicisenda”.
Luego de recibir el alta, el protagonista del hecho reconoció su culpa. “Yo ví al tren, venía como a tres cuadras. Cuando llego al Puente Negro miro para atrás porque había un inspector controlando el tránsito y cruzo la calle. Sigo corriendo por la bicisenda y me llaman dos chicos y me paso el murete. Me gritan ‘guarda’ y cuando me doy cuenta siento el bocinazo y lo tenía a dos metros. Fue todo culpa mía”, relató por Fm Sol.
Advertencia del municipio
Conocido el hecho, la Municipalidad de Santa Fe emitió un comunicado solicitando a la ciudadanía precaución y respeto a las normas de tránsito que tengan relación con el Tren Urbano.
Se instaló un moderno sistema de señalización tranviaria y vial que permite su circulación con seguridad y eficiencia. El dispositivo cuenta con semáforos instalados en cada uno de los cruces de las vías con calles y avenidas, con señales fono-luminosas (que emiten sonido y luces) además de la convencional “cruz de San Andrés” que indica la presencia de un tren.
Mediante sensores que detectan el avance del móvil tranviario en su recorrido, se accionan señales lumínicas y sonoras que alertan a conductores y peatones sobre el inminente paso del tren en el cruce de calle. Cada uno de los dispositivos cuenta con tres señales, dos luces que se encienden en rojo solamente cuando está habilitado el paso del tren y una luz amarilla que permanece intermitente mientras el tren no pasa. Cuando pasa el tren por cada cruce, se activa también una campanilla con un sonido especial.
Además, el tren activa la bocina o silbato propio ante cada cruce de calle, como está estipulado en las normas de seguridad vial. Corresponde señalar que el tren tiene siempre prioridad de paso, es por ello que los cruces con semáforos están conectados con el sistema tranviario.
Vale indicar que la formación no supera los 30 kilómetros por hora de velocidad y en caso de algún inconveniente cuenta con un sistema de freno a disco en sus ruedas, que le permite detenerse en pocos metros.