Los precandidatos a intendente y concejal Federico Fulini y Claudio “Turco” Cherep, dialogaron con El Litoral y presentaron sus propuestas, de cara a las PASO, que se llevarán adelante el próximo 16 de julio. Dentro del Partido Justicialista, su espacio, “Todos”, propone una visión alternativa co una municipalidad “con creatividad, planificación y corazón”
“Estamos haciendo un esfuerzo enorme, sabiendo que no contamos con los recursos que tienen otras estructuras, pero nos dedicamos a recorrer cara a cara a los vecinos como se hacía antes la política, no tan mediatizada. Creíamos que iba a ser dificultoso, por el contexto de tristeza y enojo y la responsabilidad que la dirigencia política tiene ante ese malestar de nuestro pueblo, pero con una serie de propuestas y un programa concreto que tenemos para la ciudad de Santa Fe, nos llevamos la grata sorpresa de que nos han recibido muy bien en sus casas. Nos propusimos hablar con mil quinientas personas cara a cara y podemos decir con gusto que lo venimos cumpliendo”, dijo Federico Fulini, el precandidato a intendente de “Todos”.
En cuanto a los reclamos, aseguró que el del empleo es el más frecuente: “Entendemos que esta ciudad puede y debe generar más oportunidades, estamos desaprovechando algunas instancias, planteamos la creación de un frigorífico público – privado que garantice la generación de puestos de trabajo y también la posibilidad de enviar cortes de carne a las carnicerías barriales a precios accesibles”, dijo Fulini y adelantó que “el ganado vendría de la zona, empezaríamos con un matadero, después con un frigorífico de clase C, para lo que se necesita un millón y medio de dólares que se puede financiar desde las arcas municipales o con acceso a créditos nacionales o provinciales, y por último, a medida que le vamos dando estabilidad, un frigorífico que pueda exportar para aprovechar también la infraestructura portuaria que tenemos”.
En el mismo sentido, el precandidato también planteó “la posibilidad de atraer inversiones privadas para que haya un astillero en la ciudad, que fabrique barcazas”. “Estamos transportando la cosecha en barcazas que no son de bandera nacional, y la industria naval genera muchísimos puertos de trabajo, porque necesita electricistas, carpinteros, pintores, la chapa la podríamos fabricar en las industrias del sur de la provincia...necesitamos un estado municipal con cabeza, que planifique, racionalice los recursos, que tenga creatividad y, sobre todo, corazón, porque el municipio está a puertas cerradas para la mayoría de los vecinos, no les resuelven sus problemas y nosotros estamos planteando otra manera de hacerlo, porque el estado no se puede hacer cargo de todo, las intervenciones tienen que ser muy precisas, pero sí puede mejorar su funcionamiento, que está siendo totalmente ineficiente.”, detalló.
El problema de los “trapitos”
Consultado por la actividad de los ciudadacoches, Fulini consideró que “primero, hay que conocer los motivos por los que las personas que ejercen un trabajo informal, como los trapitos, lo están haciendo”. “Una vez que uno conoce esa realidad -prosiguió-, se plantea la pregunta de qué pasaría si el estado prohíbe la actividad de los cuidacoches y por más duro que sea, si a una persona que tiene antecedentes penales, que no ha tenido oportunidades, que muchos no han terminado la primaria, que tiene problemas de consumo problemático...los deja sin esa posibilidad, creo que estaríamos agravando el problema para el vecino, va a engrosar los hechos delictivos”. “Lo que planteamos es regular la actividad con un orden de mérito y formar cooperativas, asignarles los lugares en los eventos... que el estado se haga cargo de la situación. Por eso hablamos de un municipio con creatividad, planificación y corazón”, insistió.
Una municipalidad apoyada en los barrios y en otras fuerzas políticas
Por su parte, Claudio “Turco” Cherep, el primer precandidato a concejal en la lista “Todos”, opinió que una ciudad como la que se ha ido consolidando no le sirve a nadie, ni siquiera al que más tiene, porque en este modelo, si hay una agenda común, entre el que más tiene y el que meno tiene, es la inseguridad, porque la desigualdad se ha profundizado tanto que ya ni siquiera al que más tiene le sirve vivir de esta manera”. “En ese sentido -continuó-, proponemos generar un cambio de matriz, que no excluya a nadie, que no se trate de que porque se puede atender al que menos tiene, alguien que tiene un poco más vaya a perder”.
“Hay que ser muy responsables, no se puede prometer cualquier cosa y tampoco desdeñar a las otras fuerzas políticas, aun cuando tengamos diferencias profundas, porque se necesita un gran acuerdo de mínima” prosiguió Cherep. “Cortar los yuyos, poner luces, pavimentar, que haya agua, cloacas...no es algo que les deje de gustar a los peronistas o a los radicales o a los socialistas ni a los conservadores”, argumentó. “Nosotros entendemos que la ciudad maquillada gasta mucho más y hay que generar un plan para por lo menos quince años en los que se pueda consolidar una idea de mínima y, en todo caso, nosotros, desde nuestra representatividad ideológica, si nos toca conducir, podamos marcar nuestra impronta”, sostuvo.
Adicciones
Para Cherep, otra de los temas en los que el estado municipal debe intervenir es la cuestión de las adicciones, que, en sus palabras, “atraviesa todo el componente social de un territorio, devasta las familias, el pibe con problemas de consumo termina por desconocer el barrio, y sobre todo expresa claramente cómo están rotos los tejidos sociales, y de un buen tiempo a esta parte, la comunidad se fue desorganizando cada vez más”.
“Entendemos que la vida no es la misma, pero el estado se fue retirando y además tuvo un plan estratégico de ciudad que tendió a esa desorganización, porque pensó que las vecinales no eran un lugar posible, casi que las persiguió bajo la excusa de la papelería, para que dejaran de ser la cercanía mayor con el vecino y la conexión con el municipio, también se retiró de las asociaciones civiles, culturales...pensó que construyendo algunos espacios edilicios que, francamente, no alcanzan para albergar a todos, iba a hacer el trabajo que la comunidad hacía históricamente”, lamentó.
“Ahí planteamos la principal diferencia y no le vamos a solucionar de la noche a la mañana el problema que tiene un pibe hoy, que no puede pagar lo que vale una clínica privada para rehabilitarse y que tiene un destino de terminar en la cárcel, o como soldadito del narco, o muerto, o todas esas cosas juntas paso por paso, pero estamos pensando en la creación de cinco centros de día en lugares estratégicos, donde el estado se pueda hacer cargo de la manutención; y, después, un proyecto que ya está en el Concejo, que se llama “Salimos jugando”, para que las entidades deportivas y culturales del barrio puedan recibir una asignación o beca por cada pibe que sacan de la calle”, concluyó.
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