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La Organización Mundial de Sanidad Animal informó que la aceleración reciente de la propagación de la enfermedad en varias regiones del mundo expone a la mayoría de las poblaciones de cerdos del planeta a una amenaza directa.
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Por la gravedad del avance de la Peste Porcina Africana y la ausencia de una vacuna contra la enfermedad, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) lanza una iniciativa mundial para el control de la PPA utilizando el mecanismo del GF-TADs (marco mundial para el control de las enfermedades animales transfronterizas) con vistas mejorar y armonizar las asociaciones y la coordinación a nivel nacional, regional y mundial.
El objetivo es controlar la enfermedad, reforzar la prevención y la preparación de los países, así como minimizar los efectos nefastos sobre la sanidad animal, su bienestar y el comercio internacional.
La organización resaltó a los países miembro -entre los que se encuentra Argentina- la importancia de notificar la presencia de la enfermedad para lograr una comprensión completa de su evolución a través del Sistema Mundial de Información Sanitaria, WAHIS.
Entre el 26 de abril y el 9 de mayo de 2019, 1322 focos estaban en curso y se habían señalado 157 nuevas notificaciones a la OIE a través de esta plataforma.
A su vez, la OIE hizo un llamamiento “para que se implementen normas y prácticas pertinentes para controlar eficazmente la PPA”, en especial a través de:
- Programas de prevención, detección temprana, intervención y políticas compensatorias,
-Trazabilidad de los cerdos y control de sus desplazamientos,
-Controles oficiales eficaces,
-Gestión de poblaciones de cerdos silvestres,
-Sacrificio de animales según las reglas de bienestar animal y eliminación sin peligro de sus productos contaminados,
-Mejora de la colaboración entre las partes interesadas y entre países,
-Programas de formación continua y de sensibilización.
En nuestro país, Senasa informó que la PPA nunca fue detectada y es de notificación obligatoria. Recomienda que “todos los responsables de la cadena sostengan y refuercen su compromiso en la prevención y eventual contención de la enfermedad”. En este sentido, aconseja mejorar las medidas de bioseguridad de las granjas, notificar de manera inmediata casos sospechosos y mortandades elevadas, no alimentar a los cerdos con desperdicios y restringir el ingreso de personas al predio, especialmente aquellas que hayan estado en países afectados”.
Además si se viajó al exterior, el servicio de sanidad señala “que no se debe ingresar carne de cerdo ni sus derivados sin autorización del Senasa, o material reproductivo sin la certificación sanitaria correspondiente.Tampoco se debe tomar contacto con animales de granja en Argentina si estuvo con animales potencialmente infectados”.