El Club Cipolletti de Río Negro atraviesa una de las peores momentos deportivos e institucionales de su historia. Toda esta tensa situación terminó en la renuncia de Pablo Gutiérrez, presidente del club, luego de una serie de amenazas.
Pedro Gutiérrez abandonó su rol en el club rionegrino por una serie de disparos que recibió en su hogar. El dirigente ya había sido amenazado con pintadas en la institución.
El Club Cipolletti de Río Negro atraviesa una de las peores momentos deportivos e institucionales de su historia. Toda esta tensa situación terminó en la renuncia de Pablo Gutiérrez, presidente del club, luego de una serie de amenazas.
Gutiérrez fuera atacado a balazos en su casa, además de soportar varias pintadas amenazantes en las paredes del club.
La denuncia quedó radicada ante las autoridades policiales y se inició una investigación que tiene como principales sospechosos a los propios barras del Albinegro. Los elementos para perfilar la búsqueda se remontan a inicios del 2022, cuando una interna de los tablones marcó el cambio de era y los autodenominados “Los Innombrables” tomaron las riendas que históricamente llevó “La Banda del Tigre” y tiempo más tarde en conjunto con “La 69”.
Sin embargo, con la finalización de la última temporada, la subcomisión de emergencia se disolvió, el armado de la nueva estructura comenzó a apremiar y en la sede la calle Mengelle no se producían más que bajas, de dirigentes en primer lugar con Horacio Pierucci (secretario) y el propio Caldiero (vice) a la cabeza, de jugadores después: Brian Meza, Boris Magnago, Ezequiel Ávila, Luciano Molini y en las últimas horas el defensor Brian Berlo.
Todo eso terminó de implosionar con el repudiable hecho de violencia en la casa particular del ya ex Presidente que lo terminó eyectado de un sillón que en este momento tiene un peso específico tremendo.