La mamá de un chico de 19 años fallecido hace nueve años en la localidad de Frías, en Santiago del Estero, reconoció al falso anestesista y recordó la escasa repercusión que tuvo su denuncia en la Justicia provincial. Zaira Mellberg, madre de Gonzalo, contó que “Romero Hiriart le puso a mi hijo una inyección en la cervical para calmar el dolor, descerebrándolo, porque le perforó la base del cráneo”. La mujer contó que cuando su hijo salió del quirófano “estuvo 12 días en agonía y, si vivía, iba a tener prácticamente una vida vegetativa”.
Si bien la causa penal que se inició en Tucumán -de donde es la familia- aún no prescribió, lo único que se logró en ese momento fue una inhibición profesional en esa provincia y en Santiago del Estero.
La madre del joven muerto dijo que reconoció a Romero Hiriart por un noticiero de televisión y acusó “al sistema del Juzgado de Frías y a nuestros abogados, porque nos engañaron y no hicieron nada, caso contrario se hubiera evitado la muerte de esta joven en Buenos Aires”, agregó.




