Dos hombres fueron condenados a 30 y 22 años de prisión por haber violado en abril de 2004 a tres mujeres en el partido de San Martín, con la particularidad de que en dos de los casos lo hicieron delante de sus novios, a quienes ataron y amordazaron para que presenciaran el ataque sexual, informaron fuentes judiciales. El fallo fue dictado por el Tribunal Oral en lo Criminal 7 de San Martín y alcanzó a Héctor Marcelo Castro, de 44 años, penado con 30 años de prisión, y a Carlos César Almada Rojas, de 25 y nacionalidad paraguaya, condenado a 22. Las violaciones por las que fueron juzgados, además de un robo a una mujer en un comercio, ocurrieron en abril de 2004, dos de ellas en una misma casaquinta abandonada de la localidad bonaerense de Loma Hermosa. Una de las víctimas tenía 15 años y era virgen, según consta en la causa, a la que tuvo acceso Télam. El 9 de mayo último, el tribunal condenó a Castro a 30 años de prisión por cuatro hechos de robo, privación ilegal de la libertad agravada por violencia, abuso sexual con acceso carnal agravado en tres casos y tenencia de arma de guerra, además de declararlo reincidente. En tanto, Almada Rojas fue penado con 22 años de prisión por los mismos delitos, aunque por dos casos de abuso sexual, ya que, mediante un estudio de ADN, se descartó su participación en la tercera violación. En ambos casos, los jueces consideraron los delitos en concurso real, lo que permitió -por la sumatoria de penas- aplicar severas condenas. En el caso de Castro, la pena fue mayor que la requerida por la fiscal de juicio Ana María Armetta, quien había solicitado 25 años de cárcel. Fuentes judiciales informaron a Télam que los hechos se esclarecieron porque los imputados fueron reconocidos cuando, al día siguiente de una violación, el 28 de abril del 2005, una de las chicas y su novio estaban en la seccional de Billinghurst y los vieron entrar esposados, tras ser detenidos por un robo. La primera violación fue cometida el 1 de abril de ese año en Billinghurst, cuando una adolescente de 15 años y su novio se encontraban en la puerta del domicilio de la chica y fueron amenazados por dos hombres armados que los obligaron a caminar hasta un descampado de la avenida Márquez. Allí les robaron sus pertenencias, ataron al chico y, frente a sus ojos, desvirgaron a su novia. El segundo ataque ocurrió el 24 de abril siguiente y la víctima fue una chica que iba en bicicleta cuando fue interceptada por dos delincuentes armados que la subieron a una camioneta y la llevaron hasta una casaquinta abandonada ubicada en Lavalle y Ruta 8, de la localidad de Loma Hermosa, donde la violaron. Por este ataque sólo Castro fue condenado, ya que no pudo comprobarse la participación del otro delincuente. La tercera violación, sucedida el 27 de abril de 2004 -un día antes de la detención de los condenados-, también tuvo como víctimas a una pareja de novios y como escenario la misma casaquinta de Loma Hermosa. La pareja fue llevada hasta ese lugar, donde el chico fue atado de pies y manos con los cordones de las zapatillas de su novia, tras lo cual los delincuentes violaron anal y vaginalmente a la chica. Télam
