Crece la tensión con Uruguay en el conflicto por la papelera

El gobierno uruguayo "puso en peligro'' la posibilidad de una reunión bilateral en Chile, la próxima semana, para delinear una posible salida al conflicto por la pastera de Botnia, cuando intentó autorizar a la compañía finlandesa para comience a operar, según evaluó una fuente oficial.

La fuente citada por la agencia oficial Télam admitió la existencia de "tratativas'' argentino-uruguayas previas al episodio del jueves en Montevideo, con el fin de realizar una reunión de tono político en la periferia de la Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado, en Chile.

Al haber firmado la autorización para que Botnia pueda comenzar a operar y llamar a una conferencia de prensa para anunciarlo, soslayando el marco del diálogo vigente a instancias de la Corona de España, Uruguay generó un acentuado malestar en la Argentina.

Visto desde la Cancillería argentina como una "provocación'', que se enmarca en el contexto de los "actos unilaterales'' que viene haciendo el gobierno de Tabaré Vázquez, la situación se tensó.

Tras esto, la presidencia de Uruguay informó que Vázquez realizará el próximo lunes en Montevideo el "bautismo'' de una barcaza que operará para Botnia transportando pasta de celulosa desde Fray Bentos a Nueva Palmira.

La confirmación se dio a poco de que Vázquez regresara a su país procedente de los Estados Unidos y sumó otro elemento en el complejo escenario pastero, en tanto la oposición uruguaya no para de criticar al Ejecutivo de su país por el episodio.

Tensión y buenos oficios

La Cancillería de España actuó rápidamente y generó que el presidente Vázquez diese una orden desde Los Ángeles para que su gobierno frenase la autorización a Botnia "hasta nuevo aviso''.

En la continuidad de los "buenos oficios'' que lleva adelante el rey de España, Juan Carlos de Borbón, quedó planteada la idea de esperar al desarrollo de la Cumbre de Chile antes de que Uruguay avance en liberar de trabas a Botnia para que empiece a producir pasta de celulosa en gran escala.

Hasta la tarde de ayer, a diferencia de lo que se sostiene en Montevideo, en la Argentina existían serias dudas de que se pueda llegar a concretar un encuentro formal en Chile entre representantes de ambos países en conflicto.

Para los principales actores en este tema que se encuentran en Uruguay no existe la menor duda (y lo dicen abiertamente) de que es una cuestión de días para que la pastera finalmente quede en condiciones de comenzar a funcionar.

"El Uruguay persiste en su actitud violatoria del Estatuto del Río Uruguay y contraría a las recomendaciones de la Corte Internacional de no agravar la controversia'', sostuvo ayer el canciller Jorge Taiana, como claro reflejo del sentir argentino.

Si vas para Chile

En tanto, el asambleísta de Gualeguaychú Juan Veronessi aseguró que la postergación "da tiempo a repensar nuestra postura y las medidas que pueda tomar nuestro gobierno''.

Para el ambientalista Jorge Fritzler, "los empresarios le tienen mucho miedo al movimiento social. Por eso, si logramos que los uruguayos se movilicen como nosotros, la empresa no va a aguantar''.

Los ambientalistas de Gualeguaychú llevarán su reclamo contra la instalación de la pastera finlandesa Botnia a Santiago de Chile, cuando la semana próxima se realice en esa capital la XVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno.

La Asamblea Ambiental Ciudadana de Gualeguaychú decidió anoche enviar a Chile una delegación con el fin de "manifestarnos ante todos los países del continente, el rey de España y el jefe de Gobierno español (José Luis Rodríguez Zapatero) y mostrar nuestra oposición a Botnia, que atenta contra la vida'', dijo el asambleísta Andrés Rivas.

Por su parte, Rivas señaló que en Chile "se va a tratar de hablar con los presidentes Tabaré Vázquez y Néstor Kirchner'' y que se le pedirá al mandatario argentino que "se mantenga firme con la postura de la relocalización, porque es una cuestión de Estado, como él mismo dijo, y que se abstenga de otra posición''.

Por tierra, por agua, por aire

Las acciones a realizar durante la cumbre forman parte de un "plan de vigilia'' que comenzará el día jueves 8, con un "grito blanco'' que pronunciarán todos los jóvenes -alrededor de 15.000- de Gualeguaychú y poblaciones cercanas, en la costanera local, frente al puerto de esa ciudad, explicó Pouler.

Ese mismo día, habrá luego "una marcha terrestre, acompañada de una marcha náutica en la cual van a participar embarcaciones de Colón y de Uruguay por el río, en la jurisdicción argentina frente a Botnia'', comentó el asambleísta.

Como dato novedoso, también se está preparando una "marcha aérea'' con la participación de aviones del "Club de Aeroamigos'', que reúne a más de 150 pilotos de toda la argentina que se han nucleado para acciones solidarias, puntualizó.

Durante la asamblea, que se realizó con una gran concurrencia, favorecida por el buen tiempo, también se analizaron detalles de la movilización que se está preparando para "el 20 de noviembre, en que se cumple al año del corte del puente internacional, pero no va a ser para festejar sino para felicitarnos por la perseverancia para defender la vida en nuestra ciudad'', afirmó Poluer. En tanto, la secretaria de la Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú, Susana Padín, informó que los abogados de la entidad se presentarán en el juzgado Federal de Concepción del Uruguay, a cargo del doctor Guillermo Quadrini, para denunciar a la empresa Botnia, instalada en Fray Bentos, por "tentativa de contaminación".

De la Redacción de El Litoral