Su obra se caracterizó por sus connotaciones metafísicas y un universo de problemas humanos fundamentales, como la incomunicación de la pareja, la soledad, Dios o la muerte.
El director de cine sueco Ingmar Bergman murió hoy a los 89 años en su casa de la isla de Faro, en el mar Báltico, informó su familia a la agencia sueca de noticias.
Nació el 14 de julio de 1918 en Upsala, localidad a 70 kilómetros al norte de Estocolmo, su padre fue un pastor protestante del que recibió un estricta educación, que marcó su vida. Cursó estudios secundarios en Estocolmo, donde también se licenció en Arte y Literatura.
Apasionado por el teatro, sobre todo el clásico, ya en la universidad dirigió una compañía de estudiantes. Acabados los estudios, centró su actividad en la escena, como autor y director.
En 1976 trasladó su residencia a Munich (Alemania), donde igualmente desarrolló su talento creativo, y en 1985 regresó a Suecia como director del Real Teatro Dramático de Estocolmo.
En esta etapa hizo montajes en 1986 como "Señorita Julia" y "El sueño", ambos de Strindberg, el "Hamlet" (1987) de Shakespeare; el "Largo viaje a la noche" (1988) de Eugene O'Neill; "Casa de muñecas" (1990) y "Peer Gynt" (1992), ambos de Ibsen; o "Cuento de invierno" (1995), de Shakespeare.
Una filmografía para la historia
En el cine sus comienzos arrancaron de los guiones que escribió para proyectos propios y ajenos, casos de los directores Gustav Molander, Alf Kjellin, Lars Erik Kjellgren y Alf Sjorberg.
Ingmar Bergman, uno de los fundadores de la Academia Europea de Cine en 1988, se estrenó en la dirección con el largometraje "Crisis" (1945), al que siguieron "Llueve sobre nuestro amor" (1946), "Noche eterna" (1947), "Ciudad portuaria" (1948), "Prisión" (1948), "La sed" (1949), "Juegos de verano" (1951), "Tres mujeres" (1952), "Un verano con Mónica" (1952), "Noche de circo" (1953), "Una lección de amor" (1954), "Sueños" (1955), "Sonrisas de una noche de verano" (1955) y "El séptimo sello" (1956).
Bergman empezaba a ser conocido internacionalmente como un autor complicado, atormentado y oscuro.
Se destacan en su trayectoria, asimismo, las películas "Fresas salvajes" (1957) -premio a la mejor dirección del Festival de Cannes de 1958-, "En el umbral de la vida" (1957), "La fuente de la doncella" (1959) -Oscar a la Mejor Película extranjera y Premio Fipresci de Cannes-, "El ojo del diablo" (1960), "Como en un espejo" (1961) -Oscar a la Mejor Película Extranjera y galardonada en el Festival de Berlín-, "El silencio" (1963), "Esas mujeres" (1964), "La vergüenza" (1968), "La carcoma" (1971), "Escenas de la vida conyugal" (1973), "El huevo de la serpiente" (1977), "Sonata de otoño" (1978) y "Fanny y Alexander" (1983).
Tras esta última, premiada con cuatro Oscar (película en lengua no inglesa, fotografía, decorados y vestuario), puso fin a la realización para la gran pantalla e inició un ciclo de telefilmes, como "Después del ensayo" (1984), "Los dos bienaventurados" (1986) o "En presencia de un payaso" (1997).
Sus guiones posteriores fueron llevados al cine por otros realizadores. Fue el caso del danés Bille August ("Las mejores intenciones"-1990, Palma de Oro de Cannes en 1992), de su hijo Daniel Bergman ("Niños del domingo"-1992) y de su actriz favorita y ex compañera sentimental Liv Ullman ("Confesiones privadas"-1996, "Infiel"-2000 y "Saraband"-2003). Su última obra para televisión fue como guionista de "Bergmanova sonata" en 2005.
Es autor de sus memorias, tituladas "La linterna mágica" (1987), y de los libros "Imágenes" (1990), el autobiográfico "La buena voluntad" (1991), la novela "El quinto acto" (1994) y "Conversaciones privadas" (1996).
Se consideraba a sí mismo como un hombre de teatro, "es toda mi vida", mientras que el cine "es para mí un trauma y una pasión", según sus palabras.
Padre de ocho hijos, Bergman estuvo casado cinco veces. La primera con Elsie Fischer, con quien tuvo una hija. Luego con Ellen Lundstrom, que le dio cuatro hijos (entre ellos una actriz, Anna).
Su tercera y cuarta esposas fueron, respectivamente, Gun Hagberg, con la que tuvo un hijo, y la pianista finlandesa Kabi Laretei, madre de su hijo Daniel, también director de cine. Su quinta esposa, Ingrid Karlebo von Rosen, falleció en 1995.
Al margen de estos matrimonios, Ingmar Bergman vivió relaciones sentimentales con las actrices Harriet Andersson y Liv Ullman. Con ésta tuvo a su hija Linn, periodista.
De la redacción de El Litoral-EFE




