La joven discapacitada de la ciudad de Paraná que quedó embarazada tras una violación, evolucionaba hoy "muy bien", luego de que el sábado a la noche fue sometida a un aborto terapéutico, en la ciudad de Mar del Plata.
La titular del Inadi de Entre Ríos, Cristina Ponce, que acompaña a la madre y a la chica en Mar del Plata aseguró a Télam que "evoluciona muy, muy bien".
La joven fue intervenida luego de que los médicos de Paraná objetaron la operación por cuestiones de conciencia, pese a que la sala Civil del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos confirmó que no es necesaria una autorización judicial para realizar el aborto.
"Obtuvimos las dos cosas por las que luchamos tanto: el cumplimiento de la ley para este tipo de embarazos y el resguardo de la prueba, deducible del material genético extraído a la joven, que permitirá determinar la identidad del violador", agregó.
Ponce destacó la actitud del ministro de Salud, Ginés González García, quien consiguió "los profesionales y el establecimiento público que garantizaron el cumplimiento de la ley".
Criticó a los médicos del hospital Materno Infantil San Roque de Paraná, que adujeron cuestiones de conciencia para no realizar el aborto a la menor violada.
"El comunicado de los médicos (fijando la posición) es absolutamente bizarro, porque no hablan de nada ideológico o de creencias, sino de objeción de técnica quirúrgica", agregó.
La diputada provincial Lucy Grimalt (La Red de Participación Popular), quien también se encuentra acompañando a la chica violada, destacó hoy la actitud de González García y criticó duramente al gobierno entrerriano, "por no garantizar" la aplicación de la ley en esta provincia.
"Como el gobierno entrerriano no lo pudo garantizar, lo cual es una vergüenza, autoridades sanitarias de otro lugar del país se encargaron de ese derecho que tiene la madre", agregó.





