La lista del obispo Piña ganó por el 56,57 contra el 43,43 %. Eso le otorga 20 bancas contra 15 del oficialismo, sepultando la posibilidad de reformar la Constitución para obtener la reelección indefinida del actual gobernador. Festejos de la oposición y silencio del gobierno nacional. Los últimos datos consignados por el centro de cómputos de Misiones otorgaron un triunfo al Frente Unido por la Dignidad (FUD) en el comicio a constituyentes de ayer por un 56,57 por ciento de los votos, lo que le valdrá 20 bancas en la convención que analizará la reforma de la constitución provincial. En tanto, el oficialista Frente Renovador por la Concordia consiguió solo cinco lugares en la convención, al quedarse con el 43,43 por ciento de los sufragios en toda la provincia. La proporción de bancas evidencia así una marcada mayoría del voto contra la reforma propuesta por el gobernador Carlos Rovira, dado que de los 35 constituyentes que conformarán el cuerpo la oposición se quedó con 20 lugares. Según los números oficiales, a favor del FUD votaron 248.197 misioneros, mientras que por el frente Renovador por la Concordia lo hicieron 190.513. Festejo del NO Anoche, decenas de militantes peronistas y radicales, cada grupo por su parte, festejaron el triunfo del NO con caravanas de automóviles que recorrieron diversos puntos de la ciudad de Posadas haciendo sonar bocinas, sirenas y silbatos hasta la madrugada de hoy. En tanto, un pasacalles con una irónica leyenda fue colocado en la esquina de la plaza 9 de Julio, que decía: ``K, si seguís, K-gaste'', lo cual era leído por los posadeños como un llamado de atención dirigido tanto al gobernador Carlos Rovira como para el presidente Néstor Kirchner, por el apoyo que brindó durante la campaña al mandatario. El mismo mensaje, colgado en dos carteles de los extremos de la plaza frente a la Casa de Gobierno provincial, llevaba la firma de la JR, la Juventud Radical que formó parte del conjunto de fuerzas que se agruparon detrás el obispo Joaquín Piña en el Frente Unidos por la Dignidad. El gobernador de Misiones Carlos Rovira reconoció cerca de la medianoche el triunfo de la oposición y señaló que ``el resultado no se discute, se acata'', a través de un comunicado difundido por la televisión estatal que no llegó a todos los medios de prensa y en el que el mandatario kirchnerista destacó también que la elección se desarrolló ``felizmente con normalidad''. Rovira, que deberá afrontar con este escenario el resto de su mandato -hasta diciembre de 2007-, evitó todo tipo de contacto con la prensa, por lo que ayer cuando fue a votar su presencia en una escuela de esta ciudad generó un gran tumulto entre periodistas, fotógrafos y sus custodios personales. Silencio en la Rosada En cuanto al presidente Néstor Kirchner, esta mañana permanecía en Santa Cruz y los representantes del gobierno nacional continuaban sin emitir opinión sobre los resultados de ayer. Kirchner está desde el viernes en Río Gallegos, su ciudad natal, desde donde siguió las alternativas de los comicios. Recién mañana tiene previsto retomar la actividad oficial en la sede gubernamental y posee en su agenda un acto de firma de convenio de obras con el partido de La Matanza, donde hay expectativa de que pueda referirse a Misiones cuando pronuncie su discurso. El silencio de la Casa Rosada seguía esta mañana -ayer no hubo definiciones gubernamentales tras conocerse la derrota- y, ante la inquietud de los medios, los voceros del ministro del Interior, Aníbal Fernández, indicaron que ``por el momento no'' hablará y una respuesta en la misma línea se obtuvo desde las oficinas del jefe de Gabinete, Alberto Fernández. En el seno del gobierno se analizaba en estas horas el discurso que se sostendrá para tratar de desligarse lo más posible de la derrota de Rovira, luego de haberle brindado un fuerte respaldo durante la campaña electoral. Y es que la Casa Rosada no sólo envió fondos a la provincia mesopotámica, sino que el propio Kirchner acompañó a Rovira en un acto en la costanera de Posadas y pidió el respaldo de los misioneros a la reelección indefinida del gobernador. En el tramo final de la campaña, el jefe de Estado evitó regresar al distrito pero envió en su lugar a su hermana, la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y al titular de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSeS), Sergio Massa.




