La viuda del profesor Carlos Fuentealba, asesinado durante la represión en Neuquén, Sandra Rodríguez, reclamó hoy la renuncia del gobernador Jorge Sobisch y advirtió que es "deber moral" del mandatario dimitir al cargo.
La orden para reprimir que dio el gobernador fue como "jalar el gatillo", manifestó la esposa del profesor, herido de muerte durante la represión policial ocurrida el miércoles, cuando docentes cortaban el tránsito de la ruta 22, entre Senillosa y Arroyitos, en demanda de mejoras salariales.
En expresiones formuladas durante un discurso frente a la Casa de Gobierno de Neuquén, Rodríguez sostuvo que si Sobisch "es tan responsable como él lo dice, sabe que le cabe renunciar, si le duele tanto que 'mi' Carlos, el maestro, haya muerto, es su deber moral hacerlo".
La mujer reclamó "cárcel" para el policía que "jaló el gatillo" y consideró que "aquellos que ejecutaron las órdenes son tan responsables como el autor material del crimen".
Rodríguez recordó a su esposo como "un hombre de campo, un hombre con mayúsculas", y dijo que "era un obrero, un empleado, un maestro, con el que padecimos la pobreza y todavía seguimos peleando el mango".
"Debemos seguir viviendo, como dijo mi hija, para hacer justicia, para que algo cambie en este mundo", manifestó.
La esposa del profesor de física y química consideró que "no hay forma de referirme a este hecho más que con esta palabra, que aunque no me gusta es la verdad: fusilaron a 'mi' Carlos y, con él, a toda mi familia".
"Así también dio vida y dio fuerza a cada alumno, a cada compañero, a cada amigo, a sus familiares y a los trabajadores", dijo la mujer al recordar a su esposo.
En un mensaje que leyó ante la multitud reunida frente a la Casa de Gobierno en Neuquén, Rodríguez manifestó que "no existe consuelo para esto".
"Carlos me enseñó a no bajar los brazos, mi amor, no los estoy bajando, hasta siempre", expresó la mujer al finalizar su alocución.
Fuente: DyN.






