El Ministerio de Salud de la provincia, a través de la Dirección de Promoción y Prevención de la Salud, dio a conocer recomendaciones a tener en cuenta ante la situación planteada desde hace unos años en el norte de nuestro país y en países limítrofes con la fiebre amarilla.
Al respecto, la titular del organismo, Andrea Uboldi, precisó que la vacunación antiamarílica se debe realizar en poblaciones que viven en áreas de alto riesgo, como los departamentos de las provincias de Misiones, Formosa, Chaco, Corrientes, Salta y Jujuy que sean limítrofes con Bolivia, Paraguay y Brasil.
También deben vacunarse los viajeros que, por actividades laborales o recreativas, transiten dentro de esas áreas de alto riesgo del país o de otros países. Deben aplicarse la vacuna por lo menos 2 semanas antes de viajar para que realmente tenga el efecto protector adecuado.
Asimismo, la vacuna puede ser aplicada a niños desde el año y adultos menores de 60 años de acuerdo a la situación de riesgo de exposición. En caso de los menores de 12 meses y mayores de 60 años esta evaluación deberá se realizada por profesionales médicos.
Sin embargo, aclaró que no deben aplicarse la vacuna aquellas personas con trastornos en las defensas como los inmunodeprimidos (neoplasia, HIV/sida, etc.), que usan drogas o están en tratamientos con quimioterapia y radioterapia; con historia de reacción alérgica severa al huevo y sus derivados; las embarazadas y los menores de 6 meses.
Uboldi planteó que -según las normas nacionales de vacunación de nuestro país-, los niños desde los 9 meses hasta el año de vida deben aplicarse la vacuna antiamarílica con consentimiento informado de los padres y, en nuestra provincia, también con autorización médica (pediatra), al igual que ocurre en el caso de los mayores de 60 años. No obstante, aclaró, se debe valorar el riesgo-beneficio, ya que ambos grupos tienen mayor posibilidad de efectos adversos.
Por último y en relación a las medidas de prevención, recomendó que es necesario utilizar repelente, rociar el cuerpo y la ropa, renovarlo frecuentemente y en especial si se mojó o bañó; disminuir el riesgo de contacto con mosquitos vistiendo ropa clara, pantalones largos, camisa de mangas largas; y utilizar calzado cerrado.




