Mónica Ritacca - [email protected]
El 15 de noviembre quedó formalmente inaugurada la temporada de playas y balnearios en la ciudad, a la vez que en los patios y terrazas de muchos domicilios particulares ya se armaron los piletines y en los clubes hay más socios para disfrutar de la pileta. Las opciones para este verano, frente a las altas temperaturas que ya se sienten agobiantes, serán muchas. Sin embargo, para evitar dolores de cabeza, quemaduras y problemas en la piel, en definitiva para disfrutar de la temporada sin tener que visitar al médico por alguna de esas razones, se deberán tomar ciertos recaudos a la hora de exponerse al sol.
Consultada por El Litoral, la jefa del Servicio de Dermatología del hospital Iturraspe, María del Carmen Gras de Leurino, manifestó que lo más importante es “ser respetuosos” con el horario permitido para tomar sol: hasta las 10.30 de la mañana o después de las 17. Cabe señalar que el mismo es el recomendado tras el cambio de huso horario que rige en la mayoría de las provincias del país.
La dermatóloga Dora Giménez, por su parte, aclaró que en el horario permitido se debe usar protección solar, y remarcó que fuera del mismo hay que evitar exponerse al sol, porque las consecuencias en la piel pueden ser gravísimas. “El protector solar debe ser resistente al agua y proteger contra rayos ultravioletas A y B. Además no debe ser inferior al factor 15, puesto que si es un factor 2, 4, 6 u 8 no están protegiendo nada”, señaló.
Asimismo, recordó que los bebés de menos de seis meses no pueden recibir protector y se aconseja no exponerlos al sol antes del año. “A los bebés hay que cuidarlos mucho: ponerlos a la sombra, vestirlos con ropa clara para que no sufran una deshidratación”, agregó la dermatóloga.
Por qué hacer caso
Exponerse al sol en los horarios permitidos y con protección es fundamental para “evitar quemaduras solares y los golpes de calor”. En tal sentido, María del Carmen Gras de Leurino explicó que “la piel es un órgano de protección y, por ende, proteger la piel es proteger la salud”. “Hay que entender que la piel no es sólo una envoltura que tenemos sino que tiene funciones importantes y específicas. Es fundamental mantenerla sana, porque en la medida en que uno la tenga, así tiene menos riesgo de contaminarse con bacterias, hongos y virus”, refirió la especialista. Y agregó: “Está demostrado que una quemadura solar importante antes de los 15 años puede derivar en que de adulto desarrolle un cáncer de piel”.
La exposición solar dentro del horario permitido, de una hora como máximo y con una protección no inferior al factor 15, no debe preocupar a quienes opten por el sol durante esta temporada, porque su salud no corre peligro. “Si uno quiere exponerse al sol por placer, porque le gusta o para disfrutar de un lindo día al aire libre lo puede hacer. Lo que no debe hacer es exponerse en el horario inapropiado o achicharrarse en una parrilla de radiación”, dijo la jefa del Servicio de Dermatología del Iturraspe.
Belleza vs. salud
Estar quemadito para lucir un color de piel donde resalte la indumentaria blanca, para denotar un ritmo de vida distendido, para demostrar que se disfrutaron las vacaciones o para evitar las cargadas sobre el pálido color de la piel suelen ser motivos por los que muchas personas optan por exponerse al sol.
Sobre esto, Dora Giménez señaló que “si uno se remonta a países de Europa puede observar que la gente ya casi no toma sol”. “El querer estar bronceado es algo muy nuestro”, dijo, mencionando que es aceptable tener un tostado suave, pero no ese “color chocolate” que aún llama la atención en muchas personas.
“Lo importante es usar protección, tomar sol moderadamente o usar autobronceantes, que son inocuos para la piel. Como dermatólogas sí estamos en contra de las camas solares, que son parrillas de radiaciones. Hay muchos que piensan que unos pocos minutos no hacen nada, pero deben saber que es un concentrado de radiaciones”, refirió Dora Giménez. Y explicó: “Ocurre que en unos pocos minutos la persona está expuesta a rayos que van a lograr estimular la pigmentación de la piel en un período corto de tiempo y eso es nocivo. De hecho, el uso de la cama solar puede producir cáncer por sus radiaciones”.
Por último —y con la recomendación de que las personas que por diferentes enfermedades toman medicación vía oral hagan la consulta a su médico, porque hay medicamentos fotosensibles—, las especialistas que conversaron con El Litoral hicieron hincapié en que tomar sol no es prohibitivo, pero sí requiere del cumplimiento de ciertas medidas de precaución.




