La llegada del rally Dakar a la capital pampeana fue escenario de una serie de reclamos, que se inició con la protesta de los ruralistas autoconvocados a la vera de la ruta nacional 5, mientras que poco después la prueba se vio interrumpida en el Parque Don Tomás, cuando un grupo de puesteros cortó el ingreso al campamento.
El reclamo del campo se inició cerca del mediodía, donde más de cien jinetes, tractores y maquinarias le dieron la bienvenida a los pilotos del Dakar, con una protesta en contra de las políticas del gobierno nacional hacia el campo.
Con pancartas con la leyenda “la mejor carne del mundo en manos de los peores gobernantes” y carteles con la “K” y el símbolo de prohibido, los autoconvocados desarrollaron una protesta pacífica, que incluyó la entrega de un trozo de lomo de exportación a la organización de la prueba, cuando los equipos entraron a la capital pampeana por el acceso este de la ruta 5.
A su vez, el vencedor de la primera etapa de motociclismo, el español Marc Coma, fue recibido con aplausos, banderas argentinas y simbología referida a la situación que atraviesa el campo.
En tanto, poco después, un grupo de puesteros y vendedores cortaron la avenida España, ingreso al campamento del Dakar instalado en el Parque Don Tomás, en desacuerdo con la medida de no permitirles el ingreso para realizar ventas. A raíz de esta situación, que generó un choque entre la policía y manifestantes, varios motociclistas y camiones quedaron varados entre la multitud, hasta que los más de cien policías y gendarmes apostados en el ingreso lograron controlar la situación. En tanto, los ruralistas anunciaron que continuarán con la protesta hasta el paso de los últimos vehículos, aunque según confirmaron, en ningún momento habrá cortes de ruta o interrupciones de la prueba.
DYN
Durante el paso de los competidores
Ruralistas protestaron al costado del camino
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