Alan Schlenker, líder de un sector de la "barra brava" de River denominada "Los Borrachos de Tablón", negó hoy tener relación con el crimen del hincha Gonzalo Acro, y afirmó que a raíz de la muerte decidió no concurrir nunca más a la tribuna a observar un partido de fútbol.
En declaraciones a Radio La Red, el conocido barrabrava que se encuentra enfrentado al grupo que lidera Adrián Rousseau, dijo que está "muy triste por todo lo acontecido", que "nunca" estuvo "a favor de la violencia" y que no tiene "intereses económicos con el club".
"Ocurrió un hecho gravísimo que es la muerte de una persona, y otro hecho gravísimo que es que se me está acusando a mí falsamente y no sé con qué intenciones", dijo Schlenker, quien aclaró que en caso de ser llamado por la Justicia concurrirá a declarar.
El barrabrava señaló que está "muy triste por todo lo que acontencido y está aconteciendo. El tema puntual es la muerte de este chico, quien fue mi amigo durante muchísimos años y con quien compartí muchísimas vivencias, de salidas nocturas, de entrenamiento, cosas cotidianas y de la vida".
"Yo fui amigo de Gonzalo durante muchos años y nos juntábamos mucho con otras dos o tres personas y nos hacíamos llamar 'El grupo chico', que era de confianza", agregó.
Sin embargo, Alan Schlenker señaló que le "resulta curioso" que hace algunos meses, tanto Acro como esos otros muchachos amigos, se distanciaron de él. "Yo no entiendo cuál fue el motivo", dijo.
Luego, durante la entrevista, se refirió a su ex compañero en la cúpula de "Los Borrachos del Tablón", Adrián Rousseau, con quien ahora mantiene un fuerte enfrentamiento por el liderazgo de la barra.
"Esta persona (por Rousseau) se juntó con Gonzalo hace muy pocos meses, creo yo que por conveniencia. Nunca fueron amigos, nunca se llevaron bien", aclaró el barrabrava, quien dijo que vive de sus ocupaciones personales como productor agropecuario y apicultor.
Schlenker negó haber participado hace 10 días de una reunión en una confitería durante la cual se habría pactado contratar a una persona para matar a otra.
El barrabrava, quien tuvo mucha exposición mediática este año a raíz de los incidentes registrados dentro del club conocidos como "La Batalla de los Quinchos", dijo que esa versión "se la contó Adrián a la revista 23 y da la casualidad que diez días atrás yo estaba esquiando en Bariloche".
"Mi relación con los dirigentes es la misma que puedo tener con cualquier socio con el que me cruzaba en la confitería o en los pasillos. No tengo ningún interés económico con el club", afirmó y negó tener relación con la obtención de un porcentaje con la venta de los jugadores de River.
"Me da bronca que se hable de esta manera, sin pruebas, porque yo jamás participé de ninguna reunión de comisión directiva.Gracias a Dios tengo mi trabajo, tengo mis actividades en blanco, soy productor agropecuario, soy apicultor, y trabajo desde hace muchísimos años", dijo.
Schlenker explicó que "nunca" estuvo "a favor de la violencia.Hasta febrero (cuando se registró 'La Batalla de los Quinchos'), la cancha de River fue la más segura del país".
"Desde que ocurrió la muerte de este joven (por Acro), tomé la decisión de no ir nunca más a la tribuna. De acá a algunos cuantos años, tal vez vaya a ver algun partido a la platea", concluyó.
Télam




