El triste final de una selección, la de Serbia y Montenegro, se consumó hoy en el estadio de Múnich cuando Costa de Marfil derrotó por 3-2 al equipo de Savo Milosevic, delantero del Osasuna español. La disolución de la selección conjunta, que sigue al referéndum que proclamó el pasado 21 de mayo la independencia de Montenegro, no pudo terminar peor en el 101 partido internacional de Milosevic, uno de los grandes delanteros de la historia del balompié balcánico. La participación de Serbia y Montenegro en este Mundial ha pasado con toda la pena y ninguna gloria después de haber sido el equipo europeo menos goleado en la fase de clasificación: sólo un tanto en contra, anotado por el español Raúl González. Los tres goles encajados hoy elevan a 10 los que le han marcado en este Mundial, donde los tres partidos que disputó terminaron con derrota: 1-0 con Holanda, 6-0 con Argentina y 3-2 con Costa de Marfil. Las cosas pintaban bien para Serbia y Montenegro, que se adelantó en el marcador con dos goles, pero luego no pudo resistir las acometidas de los marfileños. La selección de Serbia, en solitario, disputará la fase eliminatoria de la Eurocopa de 2008, que tendrá como escenario Austria y Suiza, mientras Montenegro tendrá que esperar a la fase previa del Mundial de Sudáfrica de 2010. Los estados que después de la Primera guerra mundial se unieron en un país formado por los "eslavos de sur" (traducción del nombre Yugoslavia), ya son países independientes. En el aspecto futbolístico, Yugoslavia, como reino de serbios, croatas y eslovenos, apareció por primera vez el 28 de agosto de 1920. en los Juegos Olímpicos de Amberes. La República Checa goleó al débil debutante, con 10 croatas y un serbio, por 7-0. A partir de 1929, el país pasa a llamarse Reino de Yugoslavia y el primer éxito llegó en el primer Mundial de Montevideo 1930. El equipo estuvo formado sólo por los jugadores serbios, porque los clubes croatas se negaron a ceder a sus jugadores enfadados por el traslado de la sede de Federación desde Zagreb, donde fue formada el 1919, a Belgrado. Llegó a semifinales ganando entre otros a Brasil (2-1). Después de la Segunda guerra, ya con el nombre de República Popular Federal de Yugoslavia, llegaron nuevos éxitos: medallas de plata en los Juegos Olímpicos de Londres, Helsinki y Melburne, medalla de oro en la Olimpiada de Roma'60 y medalla de plata en el primer Europeo de ese mismo año en París. En el Mundial de Chile Yugoslavia acabó semifinalista, en el Europeo de Roma de 1968, sólo una polémica actuación del árbitro suizo Dienst impidió que Yugoslavia se proclamara campeón, en el Europeo de 1976. En el Mundial de 1990 en Italia cayó en cuartos ante Argentina después del desempate por penaltis. A partir de 1991, Croacia, Bosnia-Herzegovina y Macedonia (FYROM) lograron la independencia y empezaron su propio camino mientras Serbia y Montenegro continuaban juntos bajo el nombre República Federal de Yugoslavia. Con este nombre y con un buen equipo (Mijatovic, Stojkovic, Savicevic, Jugovic, Mihajlovic, Milosevic, Kovacevic, D.Stankovic...) llegaron a octavos de final en Francia 1998. A partir de 2003, el país pasa a llamarse Serbia y Montenegro, el nombre que existirá hasta finales del año en varios deportes (el domingo el equipo de waterpolo acaba de ganar la Copa del mundo en Budapest) pero sin futuro alguno. Yugoslavia, como país entre dos guerras mundiales, ha jugado 109 partidos, entre 1946 y 1991. Como Serbia y Montenegro jugó 36. Adiós definitivo a un clásico. Fuente: EFE.
