Las entidades del campo calificaron este martes como una "nueva agresión" la decisión gubernamental de disponer un alza en las retenciones soja y girasol, y consideran que la medida es netamente "recaudatoria".
Así lo expresó esta tarde a DyN, el titular de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Luciano Miguens. El vicepresidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), Pablo Orsolini, consideró -por su parte- que la baja de las retenciones al trigo y al maíz de alrededor del uno por ciento anunciada por el Gobierno "es una risa".
"Si hubieran anunciado una reducción sustancial... pero bajar el uno por ciento no lo veo como un incentivo", señaló Orsolini a esta agencia, al analizar los anuncios formulados por el ministro de Economía, Martín Lousteau.
Orsolini criticó así lo que definió como "un modelo fiscalista", en el que el Gobierno "sigue acumulando más fondos", mediante los ajustes a las retenciones a granos y carnes.
Miguens, por su parte, afirmó que el aumento "es una nueva agresión a un sector que está haciendo todo lo posible para crecer" y manifestó que desde el gobierno de Cristina Fernández "se tomaron nuevamente medidas sin pensar en el mediano y largo plazo".
El presidente de la SRA adelantó que esto llevará a que las entidades del campo "nos reunamos para expresar la falta de conformidad" con esta iniciativa gubernamental.
"Pensábamos que iba a privar la cordura, y en cambio se dispusieron estas medidas cortoplacistas".
Miguens calculó que el aumento de entre 7 y 9 puntos en las retenciones para oleaginosas y de un punto para el trigo y el maíz hará que el Estado nacional se queden con otros 2.000 millones de pesos "quejarán de ir al campo".
Fuente: DyN