En la víspera, llegó a la planta de alta tensión de Transener, ubicada sobre la Ruta Nacional N° 19 a la altura de San Agustín, un transformador de 300 MVA (Megavatios Amper) que será próximamente instalado para aumentar la oferta energética de esta región del país.
Esta ampliación se complementa con la construcción de 19 kilómetros de red de alta tensión (aérea y subterránea) que une las estaciones de Transener y Calchines, en nuestra ciudad. Los trabajos son financiados por las empresas de energía de Santa Fe y Entre Ríos y otros agentes del mercado eléctrico argentino. Las inversiones necesarias superan los 30 millones de pesos.
El equipo que llegó pesa 375 toneladas, incluidas 106 toneladas de aceite y tiene un costo de 3 millones de dólares. Aportará 300 MVA a los 600 ya instalados y su habilitación, de no mediar inconvenientes, está prevista para fines de diciembre.
Funcionarios de la EPE indican que el nodo Santo Tomé reviste una importancia estratégica como instalación electroenergética, ya que desde allí se administra la demanda del centro y noroeste de la provincia y el centro y oeste de Entre Ríos.
Los trabajos forman parte de un conjunto importante de obras que la EPE viene impulsando desde hace tiempo, con el fin de disponer de una mayor capacidad de transformación y transporte de energía en alta tensión, para atender la creciente demanda industrial, comercial y residencial.
El consumo crecerá un 50 % en los próximos 20 años
La demanda global de energía crecerá inexorablemente en más de un 50 % en los próximos 20 años si los gobiernos no cambian sus políticas, advirtió, desde Londres, hoy, la Agencia Internacional de Energía (IEA).
Nobuo Tanaka, director ejecutivo del organismo dijo que ese aumento pondrá en peligro la seguridad energética y acelerará el cambio climático, según un informe publicado en el portal de la BBC Mundo. Aseguró, asimismo, que las necesidades de energía para 2030 tendrán una predominancia en el uso de combustibles fósiles.
"El rápido desarrollo de India y China ha causado un gran aumento en la demanda energética y el surgimiento de estos grandes nuevos actores en el mercado energético global implica que todos los países deben tomar acciones inmediatas, vigorosas y colectivas para poner freno a la desbocada demanda de energía", advirtió Tanaka.
Por otro lado, dijo que hay que generar un cambio radical en la inversión de nueva tecnología energética y en ese sentido la IEA también aseguró que ya se están considerando algunas medidas para frenar la demanda, como la promoción de la eficiencia energética y el uso de nuevas tecnologías.
El informe concluye en que en la mayoría de países ha existido más palabras que acción al momento de aplicar políticas para reducir la demanda de energía. Tanaca, dijo que "hay que actuar ahora y generar un cambio radical en la inversión de nueva tecnología energética, más segura, más limpia y más eficiente".
De cumplirse las proyecciones de la IEA, las emisiones de CO2 podrían elevarse en un 57 por ciento en las próximas dos décadas, un equivalente a 42 gigatoneladas de dióxido de carbono.






