Los candidatos presidenciales de Uruguay José Mujica y Luis Alberto lacalle expresaron hoy sus deseos de llegar a un entendimiento con Argentina en torno a la planta procesadora de celulosa Botnia, que está en el centro de un diferendo de casi cuatro años.
"Hacemos lo que podemos y si no hacemos más es porque no podemos o no nos da la nafta", dijo hoy el ex guerrillero José Mujica, durante un encuentro con la prensa extranjera, en un hotel del centro de Montevideo, según consignó la agencia DPA.
Agregó su convencimiento de que no es fácil la solución, sino ya se hubiera encontrado, pero insistió que "habrá que tener paciencia asiática" y subrayó el interés de Uruguay por preservar las buenas relaciones históricas.
El diferendo se encuentra actualmente en el Tribunal Internacional de La Haya y la sentencia se dará a conocer en los primeros meses del año entrante.
El opositor Luis Alberto Lacalle, del Partido Nacional (PN) también abogó por un entendimiento y comentó que Uruguay quiere estar en las fiestas del bicentenario de la independencia, el año próximo.
"Queremos concurrir a rendir homenaje a los revolucionarios y a estar con Argentina en la fecha más importante de su historia", expresó el veterano dirigente, que también hoy se reunió con periodistas extranjeros, en Montevideo.
Recordó que, en el primer centenario, en 1910, también Uruguay y Argentina atravesaban una situación conflictiva por el límite en el Río de la Plata. La controversia se zanjó con la firma de un protocolo de límites el 5 de enero de 1910 y que fue considerado entonces la base del tratado definitivo, firmado en 1964.
Según Lacalle, "Uruguay tiene derecho a construir esta planta y las que quiera", pero precisó que el país quiere las mejores relaciones, "no sólo por deseo, sino por interés de tener mejores relaciones con sus vecinos y con todo el mundo".
Si llega a presidente planteará el desarrollo integral de Río Uruguay, que desemboca en el Río de la Plata y éste en el océano Atlántico. Aquella vía sobre cuyas costas está la polémica planta finlandesa de Botnia debería ser dragada y, con la exclusa que está en la represa de Salto Grande, "se podrá tener un camino de más de 1.200 kilómetros de largo". "En cualquier parte del mundo un río es un tesoro y aquí es un problema", remató Lacalle.
Los dos presidenciables hablaron de otros temas y aclararon sobre la vigencia de la veda política que impide hacer proselitismo 48 horas antes de la elección.
Aunque los dirigentes de los partidos la respetan, la publicidad se mantiene en algunos portales de Internet, en las calles con la distribución de listas y hasta en este tippo de declaraciones, que merced a las nuevas tecnologías permiten su circulación en el territorio nacional.
A ese respecto Lacalle comentó que "la finalidad (de la veda) fue establecer un tiempo de reflexión donde dejen de ser aturdidos los pobres votantes con la ola de propaganda que es tanta que no se sabe si queda en la memoria" de la gente.
Evaluó que "sirve para que todo el mundo se descomprima un poco", aunque admitió que "lo curioso es que cuando el legislador estableció la prohibición no estableció penas, de manera que no hay sanción" para quien viole la veda.





