Las universidades argentinas caen en el ranking Times mientras Brasil consolida su posición
El listado internacional confirmó una tendencia a la baja para las universidades argentinas, que retroceden en calidad académica, investigación y reputación global. Hubo un cambio en la metodología del ranking que impactó en el desempeño de las universidades argentinas.
La institución argentina mejor posicionada en la lista regional es la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), en el puesto 62 (foto ilustrativa)
Se conoció esta semana el nuevo Times Higher Education Latin America University Rankings 2026, que volvió a marcar una tendencia que ya lleva varios años: Brasil consolida un liderazgo sostenido en investigación, producción científica y volumen institucional, mientras que Argentina profundiza su retroceso en los primeros puestos.
La edición 2026 clasificó a 223 instituciones de 16 países, incorporó 16 universidades debutantes, sumó a Panamá por primera vez y duplicó la representación de Costa Rica. La Argentina también creció en volumen -pasó de nueve a doce instituciones clasificadas-, pero no logró traducir esa mayor presencia en un mejor desempeño.
Una de las principales claves de este año fue el cambio metodológico implementado por Times Higher Education (THE). Hasta 2024, las universidades latinoamericanas sólo se comparaban entre sí. A partir de esta edición, el ranking regional se alinea con la metodología global del World University Rankings: 16 indicadores agrupados en cinco áreas (investigación, enseñanza, ambiente de investigación, proyección internacional e industria) y estándares internacionales más rigurosos.
Según advirtió la organización, esta actualización produjo "caídas significativas" en varias instituciones de la región y dificulta la comparación directa con ediciones anteriores.
Para figurar en la lista, cada universidad clasificada tiene que registrarse para compartir sus datos según los indicadores que solicita Times.
Sin universidades en el top 50
El informe de THE es contundente: "Argentina ha tenido un año difícil". Por primera vez en la historia del ranking ampliado, no hay universidades del país entre las 50 mejores de América Latina.
La Universidad Nacional de La Plata (UNLP) vuelve a ser la mejor posicionada del país, aunque cayó del puesto 28 al 62. Le siguen: Universidad Austral: del puesto 43 al 82; Universidad Nacional de San Martín (UNSAM): del 52 al 89.
Estas tres instituciones son las únicas argentinas dentro del grupo de las 100 mejores; el año pasado eran ocho.
Completan la presencia argentina en el ranking: UNC y UNCuyo (rango 101-125); UCA, Universidad Católica de Córdoba e ITBA (rango 126-150 o +151, según el caso); UNQ, UNR, Universidad Nacional del Litoral (UNL) y UNNOBA (rango +151).
Cabe recordar que la UBA no participa, ya que la inclusión en el ranking es voluntaria y requiere que cada institución entregue datos según los indicadores solicitados por Times.
En el podio no hubo sorpresas: la Universidade de São Paulo (USP) retuvo el primer lugar y volvió a marcar distancia respecto del resto. El top 5 se completa con: Universidade de São Paulo (Brasil), Universidade Estadual de Campinas (Brasil), Pontificia Universidad Católica de Chile, Universidade Federal de Rio de Janeiro (Brasil) y Universidade Estadual Paulista-Unesp (Brasil).
En el top 10 hay siete universidades brasileñas, una chilena y dos mexicanas (Tecnológico de Monterrey y UNAM), lo que confirma la concentración de instituciones de alto rendimiento en esos sistemas universitarios.
"Si bien Brasil domina la cima del ranking, es inspirador ver una creciente diversidad y solidez en toda la región latinoamericana", destacó Ellie Bothwell, editora de rankings de THE.
Financiamiento en debate
Los resultados llegan en un momento crítico para el sistema universitario argentino. En pleno debate por el Presupuesto 2026, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) volvió a advertir sobre la insuficiencia de fondos y alertó que el proyecto oficial "lesiona gravemente el derecho a la educación" y compromete el funcionamiento del sistema público.
En coincidencia con los 40 años del organismo, los rectores reclamaron la aplicación de la Ley de Financiamiento Universitario y pidieron recursos que garanticen "previsibilidad y continuidad".