La única mujer, a la sombra de un hombre

Lía Masjoan
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Entre los 17 precandidatos que se anotaron para disputar la intendencia es la única mujer. Sin embargo, el espacio político que la propone tiene todas sus fichas puestas en un hombre: Pablo Vallejo, su compañero de vida y primer candidato a concejal por el Partido Obrero.

Conscientes de que forman una agrupación pequeña, la máxima aspiración política es obtener una banca en el Concejo Municipal para hacer escuchar la voz de una minoría ciudadana. Por eso, tras postularse en una oportunidad al máximo puesto, ésta vez Vallejo bajó un escalón y le dejó un simbólico podio a Miriam Liguori.

Aunque la acompañó a la recorrida con El Litoral, la dejó llevar la delantera y se mantuvo siempre unos pasos por detrás. Era sábado y apenas pasaban las 9 de la mañana. San Lorenzo aún dormía pero, por su trabajo de docente, fue imposible acordar el encuentro en un día laboral.

Vio una ventana abierta y golpeó las palmas. La vecina dejó sus tareas domésticas para conversar. Miriam se presentó como una de las candidatas a la intendencia pero remarcó siempre que el objetivo es llegar al Concejo. Entregó un folleto con las propuestas del Partido Obrero bajo el título “Una lista de trabajadores y de izquierda” y le dijo que, aunque cree conocer las necesidades del barrio y de la mayoría de los de la periferia, prefiere escuchar a los vecinos. Según contó, estuvo varias veces en San Lorenzo después de la inundación y en otras oportunidades, acompañando la lucha de los desocupados del movimiento piquetero Polo Obrero.

Locuaz, se las arregló muy bien para hacer llegar el mensaje y buscó siempre distanciarse de la actual gestión municipal. A Guadalupe Soria la encontró en la puerta de su casa de Pasaje Gaboto al 1300 y le reiteró una de sus frases de cabecera: “Hoy hay dos Santa Fe: una que es la del centro, donde se ha instalado el boom inmobiliario, los hoteles de lujo y el casino; la otra es ésta, la de los barrios que siguen con las mismas carencias, se inundan cuando llueve, no tienen transporte y los compañeros no tienen trabajo”.

Promediando las 10, las cornetas de los vendedores ambulantes y las peleas de los perros callejeros ya habían obligado a varios vecinos a levantar las persianas. De a poco, San Lorenzo comenzó a tomar ritmo. Detrás de las rejas de su almacén, Juana Benítez recibió a Liguori con quejas: “Vos ves cómo está el barrio. Necesita un montón de cosas: estamos a 10 cuadras del centro y no tenemos colectivos, falta luz, caen dos gotas y ya nos inundamos y rogá que no te pase nada de noche porque no tenés quién te atienda”.

El reclamo le vino bien para recalcar su objetivo político: “El municipio tiene grandes deudas con todos los barrios de la periferia. Por eso queremos llegar al Concejo para ser la voz de los desocupados, de los trabajadores, de los que están en negro y de los compañeros de la barriada”.

Durante la caminata, Liguori consiguió sin esfuerzo la atención de los vecinos. Es que su discurso encajó como las piezas de un rompecabezas en esta barriada del suroeste, postergada y cargada de carencias.

Perfil

Miriam Liguori nació en Santa Fe el 9 de mayo de 1969. Es profesora de Artes Visuales, trabaja como docente y se dedica a la producción plástica en dibujo, pintura y fotografía. Comenzó militando en el Partido Obrero junto a los compañeros desocupados y los inundados en el 2003. Desde hace años, viene militando por la organización del movimiento de mujeres independiente del gobierno y las patronales junto al Plenario de Trabajadoras.

La prioridad

El Frente Cívico y el PJ han co-gobernado durante años y hoy, la falta de industrialización, el negocio inmobiliario para las grandes empresas, el subsidio a los empresarios del transporte, la prostitución, el trabajo en negro y la precarización laboral han sido promovidos por unos como por otros. La gestión municipal se mostró no sólo incapaz de reducir el trabajo en negro, sino que lo promovió. La lucha de los precarizados municipales pusieron a la luz que cientos de trabajadores cumplen igual tarea que el resto y se encuentran bajo “planes de capacitación” por 800 pesos.

Esta va a ser una de nuestras prioridades. La otra es la prostitución y la lucha contra la trata de personas. La impunidad es tal que además de habilitar prostíbulos se les facilita la propaganda en las páginas del Municipio en la sección de turismo bajo el nombre de Wiskerías.

La solución

Tenemos que construir una oposición independiente políticamente de las patronales. Planteamos un plan de pase a planta permanente de los trabajadores municipales contratados, precarizados o bajo el régimen de “planes de capacitación laboral”.

Contra la prostitución proponemos el desmantelamiento de todas las wiskerías y locales donde se ejerce; cárcel a los funcionarios que habilitan establecimientos que funcionan como prostíbulos; derogación de la Ley K; incautación de los bienes de las redes de trata, de los esclavistas, traficantes y proxenetas, ya sean sus bienes personales o de sus empresas. Protección y subsidio a las víctimas, y que se designen equipos interdisciplinarios para su atención. Registro nacional de desaparecidas a cargo del Estado y bajo control de las organizaciones de lucha contra las redes de trata.

La pregunta: ¿Qué política plantea para el transporte público?

Proponemos la municipalización del transporte bajo control de los trabajadores y vecinos.

También creemos que hay que terminar con los subsidios a los empresarios del transporte.

El colectivo debe ser un servicio y, como tal, debe funcionar en condiciones de igualdad para todos los vecinos de la ciduad.

Para ejercer mayor control, pediremos la apertura de los libros contables de las empresas.

Por otro lado, estamos en contra del aumento del boleto porque nos parece terrible que tengamos un transporte subsidiado y que a su vez, incremente su costo en forma permanente, porque de este modo resulta siempre afectada la gente de los barrios.

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