El nuevo álbum de Gabriel Sivak, "Miniaturas para decorar el silencio", se escucha como si uno mirara un cuaderno de viaje de otro siglo: fragmentos breves, a veces caprichosos, pero siempre poéticos.

El compositor franco-argentino radicado en París vuelve a editar con el sello Mogno Music. Su álbum invita a detenerse: siete piezas que dibujan escenas breves, texturas móviles, sonidos como postales de lo imposible.

El nuevo álbum de Gabriel Sivak, "Miniaturas para decorar el silencio", se escucha como si uno mirara un cuaderno de viaje de otro siglo: fragmentos breves, a veces caprichosos, pero siempre poéticos.
Son siete piezas que funcionan como pequeños mundos autosuficientes. Lo edita el sello Mogno Music y ya está disponible en plataformas digitales como Spotify.
"Colección de polaroids, de instantes efímeros, situaciones improbables materializadas en forma de miniatura: dibujos de Franz Kafka inspirando texturas líquidas, Guillaume Appolinaire susurrando al proletario junto a una antigua máquina de imprenta", describe el propio Sivak.

Gabriel Sivak nació en 1979, entre Buenos Aires y París. Desde hace más de dos décadas vive en la capital francesa, donde estudió composición y musicología en la Sorbona y en el Pôle supérieur Paris-Boulogne.
Fue discípulo de Édith Canat de Chizy, Éric Tanguy y Philippe Leroux. Su música ha sido interpretada por formaciones como la Filarmónica de Buenos Aires, el Coro de niños de Radio France, las Percusiones de Estrasburgo y el Cuarteto Voce, entre muchas otras.
En 2024, la Filarmónica porteña estrenó su obra "Lágrimas de Tahuarí" en el Teatro Colón. También fue compositor residente de la Casa Velázquez de Madrid, donde trabajó en su ópera "La propagación", con libreto coescrito junto a Alejandro Tantanian.

"Miniaturas para decorar el silencio" reúne encargos de distintas instituciones culturales de Europa: desde La Scala de París hasta el Centro Checo de Madrid, pasando por la Fondation Banque Populaire y la Orchestre Colonne.
Entre los intérpretes destacan el pianista David Kadouch, el acordeonista Vincent Lhermet, la mezzosoprano Clémence Vidal, y la Orchestre Petites Mains Symphoniques, una agrupación infantil dirigida por Éric Du Day.
Los temas mezclan elementos de la música clásica contemporánea con otros lenguajes: la tradición india, la canción poética, el minimalismo tímbrico, el humor. La sensación de conjunto es la de un disco en constante mutación.
El propio Sivak explica: "En este disco se conjugan lo abstracto y lo concreto, lo infantil, lo emotivo y lo absurdo. Todo a través del sonido, esa materia poderosa que usamos para decorar el silencio".
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