En más de un sentido, los próximos conciertos que tiene preparados el Coro Polifónico Provincial tendrán un carácter más bien festivo. Primero, porque forman parte del progresivo reencuentro con el público luego de dos años marcados por los vaivenes pandémicos. Segundo, porque el repertorio seleccionado está pensado en esa dirección. Así lo indicó Matías Bustafán, quien oficiará como director invitado y trató de focalizar la selección musical en ese aspecto, acorde a las circunstancias más favorables que en los meses previos.
Puntualmente, los conciertos tendrán lugar el viernes 13 de mayo a las 20.30 en el Santuario Nuestra Señora de los Milagros (San Martín 1588) y el domingo 22 de mayo a la misma hora en la Basílica Nuestra Señora de Guadalupe (Javier de la Rosa 623). Las obras elegidas para ambas presentaciones pertenecen a diferentes períodos y fueron compuestas por Johann Sebastian Bach, Edward Elgar, Alberto Ginastera y Moses Hogan.
Archivo El Litoral El Coro Polifónico en 2019.
El Coro Polifónico en 2019.Foto: Archivo El Litoral
En el caso de Bach, el ensamble vocal interpretará “Komm, Jesu, komm”, BWV 229 (motete a doble coro). De Elgar, desplegarán cinco canciones a cappella: “The shower” Op.71, N°1; “The fountain” - Op.71, N°2; “Death on the hills” Op.72 “Love's tempest” Op.73, N°1 y “Serenade” Op.73, N°2. De Ginastera, se podrá escuchar en la voz de los coreutas “Lamentaciones de Jeremías Profeta” (Op.14) y de Hogan “Didn't my Lord deliver Daniel?” y “The Battle of Jericho”.
“Salimos del barroco, pasamos al romanticismo, luego entramos en el siglo XX con Alberto Ginastera y sus técnicas de vanguardia aplicadas al canto coral y terminamos con obras más accesibles al oído del público pero no menos exigentes para cantarlas, como los negro spirituals”, sintetizó Bustafán.
Mover de nuevo la maquinaria
Aunque dirigió otras veces al Coro Polifónico en calidad de invitado, Bustafán admitió que es desafiante porque al mismo tiempo es parte del ensamble. “Debo dirigir, en definitiva, a mis propios compañeros de trabajo, lo cual es muy interesante”, apuntó. Al respecto, desde el conocimiento que implica haber transitado el grupo desde adentro, resaltó la versatilidad que posee como instrumento colectivo.
“Se trata de distintas voluntades que confluyen, es apasionante para los que tenemos el trabajo de dirigir. Por eso elegí un repertorio que pase por distintas formas de cantar, diferentes estilos y que sea ecléctico. Es un perfil que me gusta, para que la gente pueda escuchar un poco de todo”, explicó. Interpretar las composiciones será un desafío técnico, porque tienen una gran complejidad. “Pero el coro las puede transitar perfectamente gracias a su formación”, agregó.
Los conciertos previstos para los días 13 y 22 del corriente, serán para Bustafán los primeros que conducirá formalmente tras dos años de pandemia, con lo cual será un modo de reencontrarse con la actividad y volver al oficio. “Al hábito del trabajo de temporada, donde salís de un concierto con un director y entrás a otro con otro director. Algo normal en el trabajo de un coro, pero que después de dos años de pausa requiere volver a mover la maquinaria con paciencia y con la confianza de que, al conocer al organismo con el cual se trabaja, las cosas van a salir muy bien”, manifestó en la entrevista que concedió a este medio.
El Coro Polifónico está muy habituado a alzar sus voces en espacios tales como las iglesias. Para Bustafán, de hecho, Nuestra Señora de los Milagros posee una de las mejores acústicas de Santa Fe en cuanto a ámbitos religiosos. Sin embargo, lo que guió la elección de los dos santuarios tuvo más que ver con una cuestión territorial que sonora. “No debemos olvidar que somos un organismo público y tenemos que tratar de abarcar a la mayor cantidad de gente posible. Por eso elegimos dos polos opuesto en cuanto a proximidad, un espacio en el centro sur de la ciudad y otro en el norte. Nos interesa particularmente la cercanía del organismo con la gente”, fundamentó el director invitado.
De todos modos, el hecho de actuar en dos templos incidió en la selección del inventario de obras a interpretar. “Por ejemplo, en el caso del motete de Bach, está escrito para cantar en iglesias. La forma en que está compuesto y el resultado sonoro que se espera es justamente para ese tipo de acústica. Está claro que cuando uno puede elegir algo acorde, trata de hacerlo”, aseguró.
Instrumentistas y solistas
Cabe señalar que, además de la dirección de Bustafán, ambos conciertos contarán con la participación como instrumentistas invitados de Virginia Nuñez, Federico Guala, Micaela Ramírez y Daniela Cavaglia. A su vez, los solistas vocales que intervendrán son Paola Tourn, Graciela Plank y Karol Bayer.