Opinión: OPIN-04

Bush otorga a México el papel
de liderazgo en Latinoamérica

Por Orlando Lizama (EFE)


El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ha convertido a México y a su presidente, Vicente Fox, en la punta de lanza de su política latinoamericana.

Esa intención parece contraponerse a los deseos de expertos que consideran a Brasil, el gigante de la región, como un aliado estratégico natural de Estados Unidos.

"Estoy convencido de que el presidente Fox será de una influencia estabilizadora en esa parte del mundo", dijo Bush al referirse a los contactos que el mandatario mexicano ha mantenido con los presidentes Hugo Chávez, de Venezuela, y Andrés Pastrana, de Colombia.

"Tendrá un efecto estabilizador y será de una positiva influencia en los Andes", insistió Bush en su primera conferencia de prensa en la Casa Blanca.

Fox fue el primer mandatario con el que Bush se reunió en el exterior tras asumir la Presidencia el 20 de enero en lo que, entre otras cosas, según fuentes diplomáticas, constituyó un reconocimiento a la influencia histórica que tiene México sobre toda la región centroamericana y en gran parte del Caribe.

El punto de partida


México y Estados Unidos -que comparten una frontera de 3.200 kilómetros- son socios con Canadá del Tratado de Libre Comercio (TLC), considerado como el punto de partida de la soñada Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).

Bush reveló que el comercio es una de sus preocupaciones al indicar que le encantaría disponer de la autoridad del "fast track" (vía rápida) que otorga el Congreso para negociar acuerdos comerciales con la región sin que los legisladores tengan capacidad de introducirles enmiendas y en cambio sólo puedan aprobarlos o rechazarlos.

En la continuación de la revelación de lo que será su política latinoamericana, Bush se reunirá la próxima semana con el presidente de Colombia, Andrés Pastrana.

El presidente de EE.UU. indicó que espera que Pastrana le informe de los últimos avances en el proceso de paz en un momento en que muchos temen una implicación militar excesiva de EE.UU. en Colombia.

El año pasado Estados Unidos otorgó asistencia por 1.300 millones de dólares a Colombia en un plazo de dos años consistente principalmente en equipo y entrenamiento militares.

"Yo también estoy preocupado por el compromiso militar de Estados Unidos en una intervención en esa parte del mundo. Sé que estamos entrenando, y eso está bien, pero la misión debe limitarse justamente a eso", dijo.

Brasil, en segundo plano


Pero para los expertos el punto más importante de la conferencia de prensa fue el hecho de que Bush hubiera resaltado la importancia que da a México y a su presidente como factor de influencia en la región.

Hace sólo una semana, expertos en la región le dirigieron una carta con la sugerencia de que Brasil, el gigante económico de América del Sur, fuera considerado como el principal aliado latinoamericano de Estados Unidos.

Los miembros del Consejo de Relaciones Exteriores indicaron que Brasil es un aliado vital que podría ayudar a Estados Unidos a enfrentar lo que estimaron como una crisis creciente en Colombia, inestabilidad en las naciones andinas y relaciones cada vez más complicadas con Venezuela, uno de sus más importantes abastecedores de combustibles.

"Que Estados Unidos esté o no de acuerdo con Brasil, éste es un factor importantísimo en América latina. Debemos comenzar a escuchar sus ideas y a considerarlo como un importante aliado estratégico", manifestaba la carta del Consejo.

Los expertos indicaron que con una población de 165 millones de habitantes, Brasil se convertirá este año en la quinta potencia económica del mundo.

Las relaciones entre Washington y Brasilia se han visto afectadas en los últimos meses por conflictos comerciales vinculados a las importaciones siderúrgicas y de jugo de naranja procedentes de Brasil, y por divergencias respecto a la apertura de la región al libre comercio.

El grupo de expertos indicó que Bush tendrá la oportunidad de establecer la relación bilateral en ese plano cuando se reúna en abril con el presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso en Washington.

Los expertos advirtieron que dejar en segundo plano a Brasil, que integra el bloque comercial del Mercosur con Argentina, Paraguay y Uruguay, empujaría a ese país a un mayor acercamiento con la Unión Europea.

"Ya es hora de presentar una agenda positiva, sobre todo una que reconozca a Brasil como el líder regional", manifestó Arturo Porzecanski, uno de los miembros del grupo que dirigió la carta a Bush.