A pesar de ser argentino, el cantante y compositor Juan Baena estuvo viviendo en el Caribe durante los últimos años. La fortuna no le fue esquiva por aquellos lados, ya que participó en festivales de renombres, como el Iberoamericano de la Canción, celebrado en Puerto Rico, junto con figuras tan reconocidas como Ángela Carrasco o Maggie Cartés; también recibió una mención de honor del Instituto de Cultura de ese mismo estado en el marco del programa Costumbres y Tradiciones que se emite por la televisión lugareña y hasta intervino en el musical Criollísimo, que el bailarín Tony D'Astro, titular del Ballet Nacional de Puerto Rico, puso en escena en 1999.

Durante el año 2000, Baena grabó los temas que integran su álbum Embrujo, que contiene once páginas de su autoría y que acaba de ser lanzado al mercado discográfico. Ellas apuntan hacia una fusión de estilos latinos, desde la salsa al candombe, pasando por la cumbia, el meren-house y el reggae, todos vertidos con sonidos y arreglos modernos. Las letras de esas canciones son sencillas y con inclinaciones populares, sin excluir un toque de picardía. El pico del loro es una de las más representativas de las tendencias que particularizan al cantautor, aunque el CD incluye además títulos muy homogéneos, como Los callecitos, La mancha, Corazón de fuego o Castigo y recompensa.

Estrella indiscutida de la pantalla cinematográfica, Jennifer Lopez no descuida su otra faceta artística, la de cantante. Prueba de ello es su nuevo CD, J.Lo, que la compañía Sony Music lanzó al mercado discográfico. Love don't cost a thing (Amor se paga con amor) es la canción base de esta producción.