Internacionales: INTE-01

Un grueso error del FBI obligó a
demorar la ejecución de McVeigh

Reuter. Un mes más. La nueva fecha de ejecución de Timothy McVeigh es el 11 de junio.

La Policía federal olvidó entregar documentación necesaria para la defensa del condenado. El ajusticiamiento por inyección letal se postergó por un mes. El propio Bush dijo que el aplazamiento fue una decisión correcta.


Washington.- El ministro estadounidense de Justicia John Aschcroft dispuso postergar hasta el 11 de junio la ejecución de Timothy McVeigh, autor del atentado de la ciudad de Oklahoma, que dejó 168 muertos en abril de 1995, debido a un error de procedimiento del FBI anterior al proceso.

McVeigh, de 33 años, debía ser ejecutado el próximo miércoles en Terre Haute (Indiana, norte) por este atentado, que dejó 168 muertes.

"Es mi responsabilidad como fiscal general promover y proteger la integridad de nuestro sistema de justicia", explicó Aschcroft, al indicar que aplazaba la ejecución.

Los últimos preparativos para la ejecución por inyección de McVeigh, en la prisión de Terre Haute, fueron suspendidos, informó la administración penitenciaria.

McVeigh se reunió ayer en su celda con sus abogados. "Está triste, en cierta medida frustrado. Pero tiene recursos. Está analizando la situación. Quiere estudiar todas las opciones y tomar una decisión", relató uno de ellos, Rob Nigh, luego de la reunión.

El abogado manifestó que el error del FBI justificaba una moratoria no sólo en el caso de McVeigh sino en todas las sentencias federales de ejecución y sugirió que la postergación por 30 días no era suficiente para analizar la evidencia.

El departamento de Justicia no ha especificado qué evidencia contienen los miles de páginas de documentos en cuestión, pero el fallo del FBI de no entregarlos a los abogados de McVeigh viola el acuerdo de 1996 entre los abogados de la defensa y la fiscalía.

Buena salud y errores


Por su parte, el presidente George W. Bush dijo que el aplazamiento de la ejecución fue una "decisión correcta" y la calificó como una muestra de "la buena salud" del sistema judicial estadounidense.

"Es muy importante para nuestro país que la pena de muerte sea administrada de manera equitativa", dijo el jefe de la Casa Blanca, quien agregó que McVeigh "tenía suerte de estar en Estados Unidos", donde "sus derechos son respetados".

Esta declaración, sin embargo, no rebajó la presión sobre el FBI, responsable del error que obligó a Ashcroft a tomar la decisión de aplazar la ejecución.

El jueves de noche, avergonzado, el Departamento de Justicia admitió que 3.100 páginas de documentos relativos a la investigación del FBI sobre el atentado del 19 de abril de 1995 no habían sido entregadas a los abogados de McVeigh antes de su proceso, en 1997.

Según los responsables del Departamento de Justicia, estos documentos estaban diseminados en varias de las 56 oficinas locales del FBI a través de Estados Unidos.

Este error de procedimiento es bastante embarazoso para el FBI, ya que los mismos contienen entrevistas y datos recogidos cuando los investigadores sostenían la existencia de un complot y seguían la pista de un eventual cómplice de McVeigh, bautizado "John Doe 2".

Esta pista luego fue abandonada, cuando los investigadores sostuvieron que habían establecido que McVeigh había acudido solo el 19 de abril de 1995 a la ciudad de Oklahoma City para hacer explotar la bomba construida la víspera con un cómplice, Terry Nichols.

Nichols, luego condenado a prisión perpetua, hizo saber el viernes por intermedio de sus abogados que deseaba apelar su sentencia frente a las más altas instancias jurídicas estadounidenses.

Aschcroft no ahorró críticas a la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), cuya reputación afectada últimamente por una serie de casos, fundamentalmente de espionaje.

"Aunque el FBI entregó volúmenes enteros de documentos en este caso, ahora parece claro que no respetó plenamente" sus obligaciones, declaró.

Ashcroft anunció que ordenó la apertura de una investigación para determinar las razones por las cuales estos documentos no habían sido entregados a los abogados de la defensa.

Indicó que habló con el director del FBI Louis Freeh y precisó que no sabe "por qué estos documentos fueron remitidos tan tarde". Recientemente, Bush aceptó la renuncia de Freeh por "razones personales".

Aschcroft indicó, sin embargo, que según para el departamento de Justicia estos documentos "no crean dudas sobre la culpabilidad de McVeigh, y no contradicen su admisión de culpabilidad del crimen".

Al banquillo


Washington.- La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) está en el banquillo otra vez, por haber omitido entregar miles de páginas de documentos a los abogados de Timothy McVeigh, obligando a las autoridades federales a postergar su ejecución al mes de junio.

Ya estremecido por casos resonantes, entre los cuales el arresto el 18 de febrero de un presunto espía, Robert Hanssen, que operaba en su seno desde hace 15 años, el FBI fue nuevamente objeto de fuertes críticas, incluidas las del ministro de Justicia, John Ashcroft.

"Aunque el FBI entregó volúmenes enteros de documentos en este caso, parece ahora claro que no respetó plenamente" sus obligaciones, definidas por el juez encargado de la instrucción en la primera fase del proceso de McVeigh, condenado a la pena capital por el atentado cometido en la ciudad de Oklahoma, declaró Ashcroft a la prensa.

Sin embargo, estimó que estos documentos "no crean dudas sobre la culpabilidad de McVeigh, y no contradicen su admisión de culpabilidad por el crimen".

Aschroft indicó que habló con el director del FBI Louis Freeh, y precisó que "no sabe por qué estos documentos fueron librados tan tarde".

El departamento de Justicia había precisado el jueves de noche que se trataba de declaraciones bajo juramento, de informes de interrogatorios, fotos, grabaciones y correspondencia escrita.

El incidente ha avergonzado al FBI. Sucede poco más de una semana después de que Freeh anunciara su intención de renunciar en junio, dos años antes de la finalización de su mandato, sin brindar explicaciones.

Además del caso Hanssen, varios otros han afectado al FBI recientemente, entre los cuales una chapucera investigación que rodeó las presuntas actividades de espionaje de un científico de origen taiwanés, Wen Ho Lee, quien finalmente fue liberado.

El FBI continúa atormentado además por el drama de Waco (Texas), ocurrido en 1992, cuando más de 80 miembros de la secta de los davidianos murieron, luego de un sitio de 51 días. Era justamente el drama de Waco lo que Timothy McVeigh quería vengar.