El Producto Bruto Interno (PBI) de la Argentina durante el primer trimestre de 2001 cayó un 2,1% frente a igual período del año pasado, según informó el Ministerio de Economía en base a datos provisorios proporcionados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).

El informe agregó que la variación desestacionalizada del PBI registró de enero a marzo una disminución de 0,2%, en comparación con el cuarto trimestre de 2000.

En 1999 el PBI cayó el 3,4%, y el año pasado disminuyó el 0,5%. Y con los datos del primer trimestre, la economía argentina está en retroceso desde julio de 1998.

El resultado del primer trimestre condiciona el acuerdo renegociado con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en los últimos días de abril de este año, en cuya carta de intención se pautó un crecimiento del PBI de 2,5% para el año 2001, con una estimación del ministro Domingo Cavallo de un incremento cercano al 5% en el último trimestre. Además se calculaba que de enero a marzo del corriente año la caída del PBI sería de un poco más del 1%.

Ante esto varios economistas estiman que en el 2001 el crecimiento sería nulo o levemente positivo, aunque ya algunas consultoras privadas pronostican que este año habrá una nueva caída del PBI. Gabriel Rubinstein, del Estudio Broda, espera un crecimiento nulo. En tanto, para Marco Lavagna, de Ecolatina, las perspectivas de crecimiento son de un 0,4% anual.

El retroceso de la actividad económica en el primer trimestre se debió a que cayó el 1,8% el consumo privado y se derrumbó el 9,2% la inversión, los dos rubros que son los responsables por el 85% de la economía argentina.

Además, mientras las empresas de servicios cayeron el 0,8%, las que producen bienes retrocedieron 4,8%, fundamentalmente por el descenso de la industria manufacturera y el desplome del 10% de la construcción.

Los restantes rubros mejoraron levemente -el consumo público subió el 0,5% y las exportaciones aumentaron el 1%-, pero a todas luces no alcanzaron para compensar la menor demanda e inversión privadas.

En la industria, el sector alimenticio retrocedió el 4,6%, los productos textiles cayeron el 10,5%, la refinación de petróleo descendió el 6,1%, la producción de tabaco se desplomó el 14,4% y las actividades de edición e impresión bajaron el 6,7%.

Por su parte, los sectores productores de servicios observaron una caída interanual de 0,8%, según las estimaciones preliminares del organismo estadístico. Entre las ramas de servicios cayeron tanto el comercio mayorista como el minorista, y la actividad de los restaurantes y hoteles. En cambio aumentaron levemente el transporte y la actividad financiera.

A diferencia de los meses anteriores, la caída de la inversión se verificó en mayor medida en la industria que en la construcción.

Así, mientras las inversiones en equipos de producción cayeron el 12,8%, el retroceso inversor en la construcción fue del 6,8%. Pareciera que ahora la caída de la inversión tiene su epicentro en la industria, sin que la construcción deje de caer, como lo viene haciendo en forma ininterrumpida desde mediados de 1998.

El economista jefe de la Fundación Capital, Martín Redrado, sostuvo hoy que el resultado del Producto Bruto Interno del primer trimestre de este año "no fue tan malo", sino que "se mantiene la tendencia recesiva de la economía".

"Salió muy fuerte la comparación del PBI porque se hizo con el primer trimestre del año pasado, y dio una caída del 2,1 por ciento; pero si se lo mide con el último trimestre de 2000, en forma desestacionalizada, la baja es del 0,2", explicó.

Redrado indicó que "no siempre hay que comparar contra el mismo período del año anterior", y precisó que "muchas veces, lo que interesa analizar es la tendencia, para ver si la economía sale o no de la recesión".