"Acá está la verdad, familia", dijo la conductora Soledad Sylveira cuando el escribano le acercó el último sobre lacrado conteniendo el nombre del ganador. Marcelo tiene 29 años, es huérfano y vive con dos hermanos en el Tigre, provincia de Buenos Aires: su ocupación, profesor de educación física.

El ganador obtuvo un total de 357.492 votos; Tamara Paganini lo siguió con 34.626; Gastón Trezeguet en el tercer puesto con 18.837 y María Daniela Ballester -quien fue la primera en abandonar la casa- con 16.867 votos.

Para la final con los últimos cuatro ocupantes de la casa, Marcelo fue desde el primer momento el favorito: en Internet había cosechado el 73% de popularidad y su lugar sólo podía ser disputado por Tamara. Precisamente Tamara, de 27 años, uno de los personajes más controvertidos de Gran Hermano, quedó detrás de Marcelo.

"íDaniela, no sabés todo lo que dicen de mí!", gritó en un momento Tamara, cuando las revistas que llegaron hoy a la casa y los recortes de prensa le dejaban ver sólo un escaso porcentaje del alto grado de exposición mediática que tuvo, a partir de su pasado de bailarina de shows eróticos.

Hubo videos de su trabajo en un boliche porteño que se difundieron sin pudor por programas clásicos de rumores y chismes de la farándula y hubo amenazas cruzadas entre su padre y conductores de televisión: todo entrelazado con la imagen que salía del programa, la de una joven siempre en el límite del llanto, gritando, mordiéndose las uñas y abrazada a un muñeco de peluche.

El tercer finalista elegido para abandonar la casa fue Gastón, de 23 años, a quien se le atribuyeron dotes maquiavélicas para la confección de tramas políticas de alianzas y traiciones, que despertaron devaneos intelectuales y cruces para el asombro entre sicólogos, sociólogos, expertos en comunicación y, sencillamente, personajes de la farándula. Se trata de un instructor de esquí, cuyo padre confesó en la pantalla de Telefé que se enteró por televisión de la condición homosexual de su hijo.

Daniela fue la cuarta finalista, y por lo tanto la primera en abandonar la casa: la primera también en subir al escenario con pasarela al aire libre, rodeada de fans, donde recibió a su familia. Nació en la ciudad bonaerense de Mar del Plata, tiene 24 años, y es azafata y bailarina: estuvo 91 días en la casa de Gran Hermano y, de haber ganado, tampoco se hubiese llevado el pozo total.

Los cuatro finalistas fueron recibiendo durante el programa distintos fragmentos de lo que había sucedido afuera, mientras permanecían aislados, sin contacto con ningún tipo de información exterior. Se trata de un `múltiple choice', les anunció la conductora, Soledad Sylveira. Entre las preguntas se contaron los petardos escuchados el jueves, para ver si acertaban en su origen: se trataba de la Copa Libertadores de América ganada por Boca.

Pero los rostros desencajados, de asombro, pudieron verse cuando los cuatro jóvenes conocieron la noticia de la detención del ex presidente Carlos Menem. "Es verdad, no vamos a jorobar con estas cosas", dijo Solita, cuando los finalistas no comprendían si se trataba de una `broma' de Gran Hermano o, sencillamente, del hecho más resonante sucedido a nivel nacional durante los 112 días que llevó su aislamiento.

La gente, en definitiva, dejando tres pesos más IVA por llamado, definió el cierre de Gran Hermano, con votos positivos y escalonados. Los productores ya preparan la segunda edición, mientras dure en las pantallas el impacto de los reality shows.