Mayoría. Hasta fetas de salame aparecieron en los votos de la mayoría que, en la provincia y en la ciudad, no votó por ningún candidato. Los sobrios sobres vacíos fueron menos que los anulados, y los recursos elegidos para estos últimos fueron desde el organizado voto a Clemente, San Martín o Belgrano, a fotos de Osama ben Laden, imágenes pornográficas o explicaciones sobre por qué se votó en blanco.
Veda rota. Los impulsores del voto en blanco o propulsores de su impugnación -una opción que evidentemente contó con organización suficiente como para imprimir boletas falsas- repartieron en la zona sur de la ciudad de Santa Fe papeles con el nombre del presidente del club Colón, José Vignatti, durante la mañana del comicio.
Ni una. Dos vendedores de banderas del PJ (celeste y blanca, con el escudo tradicional) no tenían consuelo. Sus ofertas, que comenzaron a 10 pesos por unidad, no lograron ninguna venta. Recorrieron la sede del PJ de calle Crespo y el Comando de la lista de Weber en Hipólito Yrigoyen, pero no tuvieron eco.