El mundo reacciona por
a clonación humana
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Desde distintos países se advierte sobre los riesgos de estas técnicas. La empresa que clonó embriones humanos asegura que lo hizo con fines terapéuticos. Se pueden obtener tejidos sanos para reemplazar tejidos enfermos o muertos.
Estados Unidos, Japón, Alemania, El Vaticano. Estos son sólo algunos de los lugares desde donde surgieron las advertencias y reacciones frente al anuncio internacional de que un laboratorio privado norteamericano logró clonar los primeros embriones humanos "con fines terapéuticos".
La Casa Blanca reiteró la oposición "cien por ciento" del presidente George W. Bush a la clonación de humanos en respuesta al anuncio de un equipo de investigadores con sede en Massachussetts.
El presidente ha "dejado claro en 100 por ciento que él se opone a cualquier tipo de clonación humana", dijo la portavoz de la Casa Blanca, Jennifer Millerwise.
La empresa de investigación científica privada Advanced Cell Technology (Tecnología Celular Avanzada) anunció que había clonado efectivamente embriones jóvenes con núcleos de células madres transferidos a esos embriones.
Millerwise dijo que el presidente dio su apoyo completo para un presupuesto que pasó la Cámara de Representantes para prohibir toda clonación humana y sugirió que el Senado de Estados Unidos haría lo mismo.
Los investigadores lograron implantar el núcleo de una célula en óvulos -a los que previamente se les había quitado el núcleo original- donados por mujeres que dieron su aprobación para esta investigación que generó los primeros embriones humanos clonados que se conocen en el mundo.
A partir de las células madres se pueden generar todos los tejidos que componen el organismo humano, lo que da lugar a la medicina regenerativa para el tratamiento de enfermedades incurables hasta ahora como las afecciones neuro-degenerativas, cardíacas, hepáticas o diabéticas.
Bush "apoyó la legislación para la prohibición de la clonación humana. Y a pesar de que el Senado tiene un calendario muy ocupado, esto muestra por qué es importante para el Senado actuar", dijo la funcionaria de la Casa Blanca a la AFP.
En Alemania, la clonación de un embrión humano fue criticada duramente tanto por el gobierno como por científicos.
La ministra alemana de Educación y Ciencia, Edelgard Bulmahn, calificó de "irresponsable" esta iniciativa científica y una portavoz de su departamento dijo que el Ejecutivo alemán "ha apostado siempre por la prohibición internacional de la clonación humana".
Es "una pesadilla que por desgracia se ha hecho realidad", criticó el presidente del Colegio de Médicos de Alemania, Joerg-Dietrich Hoppe.
Las autoridades japonesas dictarán una directriz en diciembre que amplía la prohibición de clonar embriones humanos para obtener células madres y curar enfermedades, informaron hoy fuentes oficiales.
La normativa japonesa, en vigor desde junio, prohíbe la clonación de seres humanos, pero permitía el cultivo controlado de embriones para producir tejidos y órganos.
Por su parte, el profesor Jean Franois Mattei, especialista de bioética francés, pidió que se adopte rápidamente una legislación mundial "con sanciones pronunciadas por un tribunal penal internacional" para evitar la clonación humana.
"Osaron franquear la zona prohibida de experimentar con el ser humano", declaró Mattei. "Temo que los investigadores cedan al vértigo de convertirse en creadores de seres humanos", añadió, y estimó que si ahora "se ha franqueado una zona prohibida" con una "excusa terapéutica, después se podrá franquear otra" que "haría de la persona un verdadero instrumento".
El Vaticano también expresó su preocupación. La primera reacción llegó a través de monseñor Tarcisio Bertone, secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, la institución que dirige el cardenal Joseph Ratzinger. El prelado recordó la condena del Vaticano de cualquier clonación humana.
"Hay que hacer una distinción", señaló. "Si los científicos norteamericanos extrajeron una célula estaminal de un paciente para insertarla en un óvulo con el fin de reprogramarlo genéticamente, si a continuación se formó un embrión, si ese embrión fue destruido, si las células de ese embrión fueron cultivadas para obtener células estaminales que después se convierten en células nerviosas, entonces se trata de una verdadera clonación humana y debe ser condenada porque se ha creado y después se ha destruido un verdadero embrión humano", explicó.
"Pero si, por el contrario, los científicos norteamericanos lograron obtener células estaminales similares a las del paciente utilizando células estaminales no embrionarias, entonces se trataría de una verdadera conquista científica que se podría considerar como éticamente positiva", señaló. (AFP/Ansa/EFE/Reuters).
El padre Gabriel Melo, director del Centro de Bioética de la Universidad Católica de Córdoba, remarcó que "lo importante es tener en cuenta cuándo comienza la vida del ser humano, sobre todo frente a las posibilidades técnicas, científicas y económicas que hoy existen en el mundo".
En diálogo con El Litoral, el sacerdote jesuita insistió en que "un ser humano es tal desde el comienzo. El hecho de que un embrión no desarrolle todas las capacidades de la persona no significa que no sea un ser humano".
"Ese embrión ya es persona humana. En los inicios de la vida, cada célula del embrión tiene el potencial de dividirse y formar otro ser humano. Es lo que se llama la totipotencialidad de las células embrionarias. Hasta ahora, los embriones se obtenían por fecundación in vitro a través del óvulo y el espermatozoide", explicó.
"Pero acá estamos hablando de algo mucho mas fuerte -agregó-, porque el embrión se logra a través de un óvulo y del núcleo de una célula del cuerpo de la misma persona que pretende utilizar posteriormente los tejidos sanos que se formen luego de este manejo científico".
Melo reconoció que "es tan complicado explicarlo, que queda demostrado que se está manipulando algo que debería ser natural".
También se mostró preocupado por "la discriminación que se hace cuando se dice que dispongo de un ser humano para sanar a otro. Como diría Kant, el ser humano es un medio en sí mismo y jamás un fin para otra cosa. Filosóficamente uno se cuestiona que se estén usando embriones humanos para otro fin".
Por otro lado, "cuando decimos embrión humano, le estamos dando la categoría de nuestra especie, y por lo tanto tiene dignidad humana".
Finalmente, y desde su postura de creyente católico, Melo se hizo eco de la voz del Papa "frente a esta cultura de la muerte que desprecia a los embriones, a los discapacitados, a los ancianos. Que discrimina bajo una perfección física que no es tal, porque el hombre nunca fue perfecto físicamente, ni lo va a ser".
José Cibelli nació en Venado Tuerto, al sur de la provincia. Estudió en la Universidad de la Plata, es veterinario y vicepresidente de la Advanced Cell Technology, la empresa estadounidense que anunció la clonación de un embrión humano.
Cibelli aseguró que "el objetivo de este trabajo es aplicar la clonación a la medicina humana para crear células madre capaces de diferenciarse en una variedad de células como las del corazón o las neuronas".
Con su equipo, Cibelli realizó toda una experimentación que es "la primera prueba" para sostener que "la reprogramación de células humanas puede aportar tejidos para trasplante".
Para esta experiencia, los científicos trabajaron con doce voluntarias mujeres, de entre 24 y 32 años, que ya eran madres de al menos un chico, quienes donaron óvulos de manera anónima.
Al mismo tiempo, realizaron biopsias de la piel de otras personas anónimas de distintas edades y que, en algunos casos, habían sufrido algún desorden como diabetes y daños en la médula espinal.
Las células madre, que se encuentran principalmente en los embriones, pueden dar lugar a cualquier tipo de tejido del cuerpo humano si son cultivadas, lo que las convierte en un tratamiento potencial para trasplantes y para regenerar los tejidos muertos a causa del cáncer, la enfermedad de Alzheimer o de Parkinson, entre otras.
Pero sólo serán totalmente compatibles con la persona que las necesita cuando procedan de un clon del propio enfermo, porque entonces el sistema inmunológico las reconocerá como propias. (EFE/AFP).