Sucesos: SUCE-03

Delincuentes asesinaron a dos policías

Persecución y tiroteos en la localidad bonaerense de Pablo Podestá. Otros dos uniformados y tres civiles resultaron heridos. Tres sospechosos fueron arrestados. Tenían dos poderosos fusiles y otras armas de guerra.


Buenos Aires.- Dos policías muertos y cinco heridos, tres de ellos civiles, fue el trágico saldo de una persecución y violentos tiroteos desatados luego de que tres asaltantes intentaron secuestrar a un empresario en la localidad de Pablo Podestá, partido de Tres de Febrero, al noroeste del Gran Buenos Aires.

Fuentes judiciales de San Martín informaron a DyN que los tres civiles heridos son una menor de 16 años que se encontraba en el interior de su casa, un bicicletero que caminaba por el lugar con su hijo menor y la esposa del policía retirado fallecido.

Los tres sospechosos fueron detenidos, dos de ellos baleados, y en su poder se secuestró un poderoso arsenal compuesto por fusiles automáticos livianos (FAL) y pistolas calibres 9 y 45 milímetros.

La Policía identificó a las víctimas fatales como el cabo primero Osvaldo Lucero, quien recibió un disparo de FAL en la frente, y el sargento retirado Olegario Núñez, de 68 años.

Núñez recibió siete tiros al resistir el robo de su auto y los asaltantes también balearon en la pierna a su esposa, Natividad, quien permanecía grave.

Secuestro


Según fuentes judiciales, todo comenzó cerca de las 10.30 de ayer, cuando un auto Ford Focus color blanco y vidrios polarizados, con tres ocupantes, estacionó en la intersección de las calles Pérez Galdós y Madariaga.

Dos de los sospechosos, fuertemente armados y con chalecos antibalas, bajaron del auto y amenazaron a Luis Armando Zárate, de 45 años, un empresario propietario de una fábrica dedicada al reciclaje de envases de vidrio ubicada en esa cuadra.

"Vamos a la comisaría", le dijeron al empresario que estaba hablando con algunos empleados. Luego lo introdujeron por la fuerza en el vehículo y lo obligaron a ponerse en la parte de atrás, con la cabeza gacha.

Los asaltantes intentaron llevar a Zárate a su casa, pero éste se negó y, como no tenía plata, lo condujeron hasta la residencia de clientes del empresario, a los que llamaron "Los Rubios".

Allí amenazaron al responsable para que les entregara dinero, luego de lo cual huyeron.

Persecución y balacera


Los empleados de Zárate habían realizado la denuncia ante la comisaría 5a. de Tres de Febrero, cuyo personal comenzó una persecución a la que se sumaron comisiones del Comando de Patrullas de la zona.

Los sospechosos fueron interceptados en la esquina de Pérez Galdós y Francisco Sierra, donde se generó un feroz tiroteo en el que los asaltantes dispararon una ráfaga de FAL contra los policías.

Uno de los tiros dio en la frente de Lucero, conductor del patrullero, que terminó chocando contra un camión. Otro disparo dio en el brazo derecho de su acompañante, el sargento Carlos Gustavo Villarreal, quien fue trasladado en helicóptero al Churruca, donde lo operaron.

Los asaltantes abandonaron el auto, oportunidad que fue aprovechada por Zárate para escapar por la luneta, hecha trizas por los disparos. El empresario mostró un pañuelo celeste, al tiempo que uno de los policías lo conoció y lo rescató ileso.

Como producto de la balacera, una chica de 16 años que estaba en el interior de su casa recibió un disparo en el ojo izquierdo y fue internada en el hospital Castex, donde se encontraba fuera de peligro.

A su vez, un bicicletero identificado como Miguel Angel Guiter, que caminaba con su hijo, fue baleado en el abdomen y permanecía en grave estado en el mismo nosocomio.

Poder de fuego


Los disparos habrían partido de las armas de los delincuentes, dijeron los investigadores. En el Focus se hallaron unas 30 vainas de FAL, lo que da una idea de la magnitud del tiroteo que duró cerca de una hora y se circunscribió a unas 20 cuadras a la redonda. En el hecho también fue herido el agente Diego Matías Ibañez, del Comando de Patrullas de Tres de Febrero, con una esquirla de bala en su cabeza.

Mientras tanto, los asaltantes tomaron por Pérez Galdós y a las pocas cuadras interceptaron un Renault 12 Brak en el que estaban Núñez y su esposa, a quienes intentaron robarles el vehículo.

El policía retirado se habría resistido y recibió siete disparos, mientras su esposa fue baleada en la pierna izquierda, a la altura de la ingle, y trasladada al hospital Bocalandro, donde fue operada y se encontraba grave.

En ese momento, se produjo un nuevo enfrentamiento en el que uno de los sospechosos fue herido y detenido, mientras que los otros huyeron en el Renault, pero a las pocas cuadras chocaron contra un Peugeot 404 y fueron atrapados.

Identificados


Los arrestados fueron identificados por voceros judiciales como Miguel Angel Salinas, de 29 años; su hermano Daniel, de 23, con un disparo en el tórax y otro en una de las piernas; y Alberto Cajal, de 29, herido en uno de los brazos y el cuello. Todos son oriundos de Eufrasio Alvarez.

La Policía secuestró dos fusiles automáticos livianos (FAL) con cuatro cargadores empalmados para mejor recuperación de fuego, dos pistolas Magnun 44 y cinco pistolas 9 milímetros -nueva generación- y una escopeta 12/70, además de gran cantidad de municiones. (DyN).

Solá niega"mano dura"


Buenos Aires.- El gobernador bonaerense, Felipe Solá, respaldó hoy, durante el entierro de uno de los policías asesinados ayer en Pablo Podestá, declaraciones en las que el jefe de la Policía Federal, Roberto Giacomino, advirtió a los delincuentes que "se cuiden".

"Me parece bien lo que dijo el comisario Giacomino y lo comparto completamente", dijo Solá luego de saludar a familiares y despedir los restos de uno de los policías muertos ayer en el enfrentamiento de la localidad bonaerense de Pablo Podestá, partido de Tres de Febrero.

Además, al finalizar la inhumación de los restos del cabo primero Osvaldo Lucero, el gobernador afirmó que si la policía se manejase con consignas de mano dura, "los delincuentes ayer no hubiesen sido capturados con vida". (Télam).