El gobierno continúa con la
ronda de diálogo político
Domínguez recibió hoy a la conducción radical. Fuerte oposición a la idea de transformar la Asamblea Legislativa en Constituyente. Coinciden en que se puede avanzar en la reforma política con leyes.
El ministro de Gobierno, Lorenzo Domínguez, recibió este mediodía a la mesa de conducción de la Unión Cívica Radical, encabezada por Santiago Mascheroni, encuentro que se prolongaba al cierre de la presente edición. La reunión, como anticipó Domínguez a El Litoral el pasado sábado, busca acuerdos para concretar una amplia reforma política en la provincia a fin de bajar el gasto. Los diputados Eduardo Di Pollina (socialista) y Miguel Bullrich (PDP) salieron al cruce de la propuesta del titular de la Cámara de Diputados, Alberto Hammerly, de constituir en Asamblea Constituyente a la Asamblea Legislativa (nuclea a todos los diputados y senadores).
Domínguez insistió en hablar de la "informalidad" de los encuentros que se sucederán en los próximos días con la conducción de la democracia progresista y del socialismo democrático. "No hay agenda. Estamos explorando la voluntad de reforma que existe en las fuerzas con representación parlamentaria en la provincia", señaló el titular de la cartera política. El viernes último, Domínguez habló ya del tema con Hermes Binner, intendente socialista de Rosario.
Al ingresar al despacho de Domínguez, Mascheroni fue sumamente cauto y prefirió no abrir opinión hasta tanto no escuchar "formal y oficialmente la propuesta del gobierno". El presidente del comité provincial radical dijo que el mecanismo a utilizar será conversar la propuesta en el seno de los cuerpos partidarios y luego con los bloques de senadores y diputados provinciales.
En cuanto a la propuesta del presidente de la Cámara de Diputados de transformar la Asamblea Legislativa en Constituyente, Mascheroni pretende conocer las argumentaciones, aunque admite que "en principio, presenta dificultades desde el punto de vista de las facultades y legitimaciones, pero no quiero hacer conjeturas antes de escuchar los alcances, los fundamentos".
Por otra parte, el presidente del radicalismo señaló que si se pretende modificar el régimen municipal o comunal, se lo puede hacer dictando nuevas leyes orgánicas para esas instituciones. Lo propio puede hacerse con respecto al sistema electoral, el que, por ahora, no figura en el texto constitucional.
El presidente del bloque Socialista de la Cámara de Diputados, Eduardo Di Pollina, señaló que "transformar la Asamblea Legislativa actual en Convención Constituyente implica un absurdo que no resiste un mínimo análisis jurídico-institucional". El diputado socialista salió así al cruce de declaraciones formuladas por Hammerly al El Litoral.
Tampoco avaló la posibilidad de que se modifique la Constitución provincial por alguna decisión del presidente Duhalde, como habrían sugerido algunos funcionarios, para quienes habría que "atender también lo que pueda llegar a resolverse en el orden nacional, ya fuere porque Duhalde decida convocar a elecciones o se disponga a transformar en Asamblea al Congreso y a las legislaturas provinciales".
Recordó que "las provincias se dan sus propias constituciones, según lo establecen los artículos 5 y 121 de la Constitución nacional, por lo cual ni el gobierno central puede imponer cambios en la Carta Magna provincial, ni el gobierno santafesino puede pedir que las reformas las realicen quienes no han sido elegidos para ello".
"Quienes, desde lo más alto del gobierno provincial, ensayaron estas ideas, quieren que la participación de la gente sea nula y no dudan en plantear la posibilidad de introducir el sistema de enmiendas para cambiar la Constitución cada vez que lo necesiten, sin convocar al pueblo", afirmó Di Pollina, y lo vinculó con una antigua pretensión del justicialismo gobernante sobre la reelección del gobernador.
"Creemos que se intenta un camino peligroso, porque es un atajo inconstitucional. La reforma de la Constitución debe realizarse mediante el método que ella impone, de manera que sea el pueblo, a través de una genuina representación, por el sistema D'Hont, el que realice los cambios".
El legislador socialista coincidió con Mascheroni en que es posible instrumentar algunos cambios en forma inmediata, por vía legislativa, como por ejemplo modificar las leyes orgánicas de municipios y comunas, "adaptándolas a la Constitución nacional, que consagró en 1994 la autonomía municipal, y derogar el sistema electoral de la Ley de Lemas, que, aparte de su esencia tramposa, es el sistema electoral más caro".
El secretario general del Partido Socialista Popular, Rubén Giustiniani, señaló que "hay que convocar a una Asamblea Constituyente que impulse una profunda reforma política y la remoción de los nueve miembros de la Corte Suprema de la Nación tan cuestionada por la mayoría de la ciudadanía". El socialismo popular también quiere poner a consideración de la Asamblea el análisis de la deuda externa.
Giustiniani realizó estas declaraciones en la ciudad de Concepción del Uruguay, en la provincia de Entre Ríos, en el marco del 13er. Campamento Nacional de juventud del PSP donde participan más de 600 jóvenes de todas las provincias.
El legislador nacional sostuvo que "el país, junto a una reformulación económica y social, debe hacer una profunda reforma política. Por eso hay que convocar a una Asamblea Constituyente donde exista participación y debate de la ciudadanía acerca de esta crisis de legitimidad. La ciudadanía reclama a gritos que exista una reforma política, que incluya aspectos relacionados con un sistema electoral más participativo".
Con respecto a los reclamos de austeridad que exige la gente "es fundamental -explicó el diputado santafesino- que la Asamblea debata cuánto debe ganar el presidente de la Nación, cuánto debe ganar un diputado, un ministro, un legislador provincial, un intendente o un concejal. Hay que incorporar al debate el futuro de la deuda externa e interna, desde la reformulación de las políticas económicas y sociales", completó.
Por su parte, Miguel Bullrich, diputado y secretario de la junta provincial del Partido Demócrata Progresista, calificó de "barbaridad" la propuesta de Hammerly. "Es ilegal e inconstitucional", afirmó a El Litoral. "Si se quiere modificar la Constitución debe convocarse a elecciones, y así lo pusimos de manifiesto en el proyecto que presentamos con el diputado Favario el año pasado para abaratar los costos y darle mayor legitimación política a las autoridades". Bullrich admite que hace bastante tiempo que en la provincia se habla de retocar el texto constitucional. "Nos parece bien esta nueva ronda de diálogo con el gobierno, ya que más que debates estériles, se necesita ir consensuando las modificaciones".
Para el PDP éstas deben pasar por llevar a la unicameralidad con representación mixta, Consejo de la Magistratura, autonomía municipal, extensión del mandato de los presidentes comunales y juicio político para el vicegobernador.