Pantallas y Escenarios: PAN-03

Un día en las carreras


Entre las ideas de Sylvester Stallone (aquí argumentista, guionista, actor y productor) y las excelencias de los efectos especiales logramos hacer una síntesis entre el poderío de una industria y la pobreza de imaginación que preside a la mayor parte de los productos de Hollywood. El mundo de la Fórmula Uno no puede ser tan simple y banal como lo muestra esta película, ni las escuderías y corredores pueden exponer sus intereses tan elementalmente. Todo debe ser mucho más complejo y, sobre todo, menos ingenuo.

Pero de lo que aquí se trata es de mostrar un par de bellas mujeres, la honestidad y don de gentes de otro par de corredores, alguno aferrado a sus esquemas y vicios de poder, otros para los que la vida se llama "ganar carreras" y más que nada, filmar unas cuantas de ellas y poner todos los peligros a la vista. Y allí son los efectos especiales los que se llevan la mejor parte, mostrando accidentes y despistes mejor que en la realidad.

La endeble excusa argumental reside en oponer el orgullo de unos a la simplicidad de otros, partiendo del hecho de que el dueño de un equipo convoca a un corredor ya retirado (Stallone), para que `ayude' con toda su experiencia a un novato que está a punto de perder el campeonato mundial. El lector podrá imaginar lo bien que lo ayuda y cómo finalizará esta historia, cuyo único objetivo es mostrar el espectáculo de las carreras.

Con actuaciones a cual más lamentable, queda aquí referirse a lo conseguido. Entre los efectos y los prodigios de cámara, ayudados por un eficiente montaje de Steve Gilson y Stuart Levy, pasa lo más rescatable de este filme al que más vale ver como una suerte de noticiero muy bien editado, que como una película.

"ALTA VELOCIDAD"


("Driven", Estados Unidos, 2000); Dirección: Renny Harlin; guión: Sylvester Stallone, sobre su propio argumento compartido con Neal Tabachnik y Jean Skrentny; fotografía: Mauro Fiore; música: BT; montaje: Steve Gilson y Stuart Levy; Intérpretes: Sylvester Stallone, Burt Reynolds, Gina Gershon, Kip Pardue y Robert Sean Leonard; duración: 117m. Presentada en Cinemark 8.

Juan Carlos Arch