En las últimas horas se difundieron declaraciones de la jefa del Departamento de Climatología del Servicio Meteorológico Nacional, Silvia Núñez, en el sentido que se evidencian señales de El Niño. En el Pacífico ecuatorial detectaron un calentamiento de las temperaturas del agua de mar, tanto en la superficie como en profundidad.

Este calentamiento se registra además en las costas de Sudamérica.

Respecto al fenómeno, Núñez reveló que se dan varias señales que producen su desencadenamiento. Uno es el cambio de temperatura del océano Pacífico ecuatorial, al originar una contracorriente cálida que baja bordeando la costa occidental sudamericana y vientos anómalos del oeste, en lugares donde normalmente hay viento del este.

Cada evento varía notablemente entre uno y otro, principalmente en lo que se refiere a su intensidad y duración, por lo que se los ha clasificado en cuatro categorías de acuerdo a su intensidad: débil, moderado, fuerte y extremadamente fuerte.

La corriente afecta en forma directa a países sudamericanos como Perú, Ecuador y Chile, produciendo cambios en la fauna marítima. También puede ocasionar sequías en el noreste de Brasil, Colombia, Australia, sur de Africa y lluvias abundantes en la zona del Ecuador, en la parte sur de Brasil, Paraguay y Uruguay.

La meteoróloga estima que si finalmente el fenómeno se desencadena podremos llegar a tener mayores lluvias en la primavera. Afecta más en las estaciones de transición, como primavera y otoño. En contrapartida, en la zona del noroeste El Niño tiende a provocar sequía.

El Servicio Meteorológico también está observando que en las próximas semanas se producirán mayores lluvias en la zona del noreste del país, como Misiones, Corrientes, parte del Chaco y Formosa. Esta predicción de mayores lluvias en este sector ya estaría relacionado con las anomalías que se ven y que son antecedentes del fenómeno de El Niño, mencionó la investigadora.

Aseguró que la corriente trae mayores lluvias en el caso de nuestro país, pero habrá que esperar qué ocurre este año con el paso de los meses.

Las lluvias continuarán en marzo pero se reducirán en abril y mayo, en un otoño con importantes precipitaciones en todo el país pero con días cálidos y despejados, informó hoy el jefe de Pronósticos Especiales del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Hugo Hordij.

Reconoció que existe una gran probabilidad de que en marzo llueva más de lo normal, pero no excesivamente y agregó que eso no tiene que repetirse en abril y mayo, meses en los que habrá jornadas calurosas y despejadas.

Hordij admitió que las lluvias se pueden hacer persistentes debido a la retroalimentación que siempre existe pero el efecto de la lluvia, evaporación y nuevas lluvias, puede atenuarse.

El meteorólogo sintetizó que éste será un otoño para remeras y paraguas por el predominio de masas tropicales muy húmedas que interactúan con sistemas meteorológicos del oeste con mucha energía.

Las masas de aire frío vienen del Pacífico sur y cuando llegan a la Argentina -aclaró- tienen suficiente energía para generar tormentas.

``A medida que avance el otoño es posible que existan movimientos descendentes de estas masas de aire en el continente sudamericano que inhibirán el desarrollo de las tormentas''.

La humedad la tenemos pero habrá algunas semanas de tiempo cálido y despejado para el resto del otoño, sobre todo en abril o mayo, sostuvo.

Descartó que este período de intensas lluvias en Argentina esté relacionado con el fenómeno de El Niño, aun cuando ya hay un recalentamiento de la atmósfera y de las aguas en la costa peruana, síntoma habitual de la llegada de las anomalías.

Pero Hordij precisó que las temperaturas altas que se dan en esta época van a continuar por encima de lo normal en el otoño hasta junio. ``Podemos tener alguna entrada de aire frío desde el sur, pero vamos a tener en promedio temperaturas superiores a las normales''.(Télam).

En los departamentos Constitución y General López se registraban hasta media mañana lluvias muy intensas, según datos suministrados por la Dirección de Comunicaciones. En algunas localidades superaron los 100 mm (Alcorta, Cañada Rica, Godoy, Pavón Abajo, Santa Teresa) y en Maggiolo 230 milímetros.

En la zona centro-norte del departamento General López el promedio fue de 120 mm.

En la ruta N° 8, kilómetro 389, cerca de la localidad de Maggiolo, la altura del agua sobre el camino era de 50 centímetros, y permanecía cortada al tránsito liviano en un tramo de 600 metros.

En la localidad de María Teresa había 20 personas evacuadas, alojadas en el cuartel de bomberos, mientras la zona periférica presentaba casas inundadas (60 centímetros de agua aproximadamente en su interior). De persistir el temporal tenían previsto evacuar el barrio Fonavi (50 personas).

El caudal de la laguna de Chascomús continuaba hoy en creciente, y en prevención de un desborde la Municipalidad comenzó a reforzar las defensas del casco urbano.

El secretario de Obras Públicas de la ciudad de Chascomús, Daniel Giacobbone, explicó a Télam que ``la laguna creció un poco hoy: de 8.01 que estaba ayer, ya está 8.05''.

``Sigue lloviznando, continuamos con el bombeo en dos barrios y se están reforzando con barro las defensas, y hasta el momento podemos decir que la situación está bajo control'', precisó.

No obstante, Giacobbone añadió que ``estamos en un gran operativo, armando todo en prevención que ocurra una situación similar a la del año pasado''.

Según el funcionario comunal, en lo que va de ese mes cayeron 400 milímetros, y desde el comienzo de este año unos 500, en tanto que el régimen de lluvias regular es de 950 milímetros anuales. (Télam)