Economía: ECON-02 General Motors subió un 22% los salarios del personal
El gremio pedía que los sueldos promedio pasaran de 1.100 a 1.500 pesos. Hacía hincapié en la suba de la producción y el retraso que generó la inflación.


Rosario (C).- Los empleados de la General Motors (GM) consiguieron que la empresa les compense, en parte, el deterioro provocado por la inflación con aumentos de salarios. El acuerdo implica una suba del 22% de los sueldos básicos de los 800 empleados, la extensión de tickets de comida por $60 y una cláusula de ajuste en relación a la evolución del índice de precios.

El Sindicato Mecánico del Transporte Automotor (Smata) pretendía que la perspectiva favorable para la colocación de la producción se sintiera en los bolsillos de sus afiliados. En principio se pedía un 50% de aumento, para equiparar los salarios al costo actual de la canasta básica familiar, lo que implicaba llevar sueldos promedio de $1.100 a $1.500. Pero la empresa no se movió del 22% y una asamblea de operarios acabó por aceptar la propuesta.

Los gremialistas aspiraban a sacar provecho del acuerdo bilateral alcanzado hace una semana que permite que las terminales automotrices argentinas exporten dos autos por cada uno que se importe desde Brasil, lo que significa que este año las fábricas nacionales venderán al exterior 125 mil unidades adicionales. Esto, sumado al convenio con México, que habilitará la colocación de 50 mil automóviles en ese país, y con Chile, que espera 27 mil coches argentinos, genera un impacto inmediato en la producción de GM: no sólo no habrá desocupación en las terminales sino que se necesitará convocar más mano de obra.

Efectos positivos


En la planta de GM del sur de Rosario ya tomaron 30 empleados por contrato este mes. Y este año ya se habían producido reincorporaciones desde que, en marzo de 2001, se desatara un fuerte conflicto con el cese de labores de 102 operarios. La planta llegó a ocupar, a poco de su instalación, 1.200 empleados.

El oxígeno que supone el plan exportador anunciado el viernes pasado fue simultáneo a la discusión del convenio laboral entre los directivos de GM y Smata, en Rosario. Las paritarias comenzaron hace dos meses y terminaron este lunes.

La empresa había puesto a consideración del sindicato lo que denominó su propuesta final: un 22% de aumento sobre los salarios básicos a las dos categorías (polivalente completo y polivalente especializado completo) más $60 mensuales en tickets de comida. Y también se comprometió a que si el índice inflacionario, medido a partir del mes de junio pasado, alcanzara un 23% de incremento en el futuro, se corregirá el perjuicio del retraso salarial con un aumento del 35%.

Desde el sindicato requerían subas mayores previendo lo que, en el sector, es un horizonte venturoso: el ritmo de producción aumentó de 18 a 22 unidades por hora, lo que hace un total de 180 autos saliendo actualmente por día de las líneas de producción, es decir, unos 4 mil mensuales. Para ello, volvió al trabajo por contrato a personal desafectado hace 17 meses y se cumplen horas extra. Y la GM firmó convenios para exportar a Brasil, Chile, México y Uruguay y Paraguay.

No obstante, el acuerdo final se rubricó en los términos de la mayor oferta formulada por la empresa. Dentro del marco del convenio, no solamente se discutieron salarios; sino que también se conversó sobre el régimen laboral general y horas extraordinarias.