A pesar del mucho tiempo que ya lleva radicado en Buenos Aires, no logró perder esa tonadita cordobesa de los tiempos tiernos de su Río Ceballos natal. Se llama Héctor Baldassi, le dicen "Coneja" y es para muchos el mejor árbitro del fútbol argentino.
Su romance con el fútbol no estuvo vinculado a un silbato, sino a la pelota. Es que Baldassi fue jugador de Huracán de Córdoba. "En mi club, que tiene la camiseta igual al Nantes, jugaron conmigo Mario Ballarino, que fue entrenador de Talleres, el arquero Manuel Serrano y José Luis Cucciufo, que llegó a ser campeón del mundo en México '86".
-�Cómo te definirías?
-Era un volante limitado y para nada tan técnico. De todos modos, parece que al club le servía, porque me iban a buscar. Me terminó cansando eso de estar concentrado, los viajes. Posicionalmente, me ubicaba como un cuarto volante tirado a la izquierda.
-�Hubieras tenido futuro?
-Sí, si quería seguía. No me gustaba ir todos los sábados y domingos a Córdoba capital. Por eso me volví a jugar a mi pueblo, Río Ceballos. No se qué hubiera sido del Baldassi jugador. Lo que sí sé es que no tenía como jugador el sacrificio que tengo como árbitro para levantarme y entrenar todos los días.
-La sensación es que el Baldassi árbitro se muestra como un tipo demasiado simple.
-Es que uno se tiene que mostrar como es. La profesión tiene cosas y momentos ingratos, pero sigo siendo una persona tranquila, que disfruta lo que hace. Estoy convencido de que hay que desmitificar el arbitraje. Me considero un juez alegre y me presento de esta forma. No es necesario tener cara de traste para ser árbitro y dirigir fútbol en la Argentina. Tampoco hay que ser autoritario.
-�Cómo te llevás con el periodismo especializado, es decir el deportivo?
-Los respeto profundamente, porque se prepararon para poder calificar a un árbitro. No acepto que juzguen intenciones, porque me considero un buen tipo en lo humano. Soy sano, no tengo maldad. Después, con los puntajes no hay dramas, porque ése es el trabajo de ellos.
-Vamos a volver a los inicios: �qué recuerdo retenés de la infancia?
-Haberme criado en un pueblo como Río Ceballos me dio un montón de cosas que no se pagan con nada. Voy a volver ahí a vivir en algún momento para elevar la calidad de vida, la mía y la de mi familia. Me gustaría que se diera medio rápido, así mis hijas disfrutan lo mismo que disfruté yo en su momento.
-�A qué te fuiste de Río Ceballos a la Capital Federal?
-La verdad que hoy no lo sé, porque sinceramente me fui sin nada. Nada definido, preparado ni pensado. Así y todo, me fueron bien las cosas.
-En su momento tenías una tarjeta de presentación que decía "Héctor Baldassi... Ministerio del Interior".
-Es que cuando hice un trabajo, que fue el Encuentro interdisciplinario del desarrollo creativo de la mujer, quedé como secretario privado de la embajadora, que era subsecretaria de los Derechos Humanos y la Mujer. Fue desde el '93 al '97. Me dedicaba mucho al protocolo. La mujer que me abrió las puertas fue designada embajadora argentina en Bolivia y pasé al Ministerio del Interior, hasta que llegué a la presidencia en Acción Social con María Eva Gatica.
-Quiere decir que estuviste al lado de los políticos. �Se tienen que ir todos, como pide la gente?
-No se deben ir todos, porque en cualquier rubro hay buenos, malos y regulares. En la política hay gente que tiene vocación y esfuerzo. Hay que seguir para adelante. Si vamos a los bifes, me gustó Menem, más allá de las equivocaciones. Hoy pienso que a este problema lo resuelve un político de raza, y Menem lo es.
-�Qué pensás de Reutemann?
-Es una excelente persona y un muy buen gobernador. Lo veo como una persona que tenía posibilidades de ser presidente, y como se bajó de la candidatura, ya no pienso más en él.
-�Y De la Sota?
-No me cierra; creo que carece de grupos de trabajo. Por ejemplo, volviendo a la pregunta anterior, de Reutemann se sabe que tiene un Ministro de Economía que es muy bueno. Si no queda otra, a De la Sola sólo lo votaría como justicialista.
-�Qué pensás de las encuestas que ubican primera a Elisa Carrió en la carrera presidencial?
-Ya tenemos experiencia de gente que hacía denuncias y salió volando en un helicóptero porque no tenía capacidad para estar gobernando. Desde esto punto de vista, me da miedo. A la Carrió nunca le escuché alguna propuesta de algo. Denuncia, denuncia, denuncia y nada más. Que me tiren alguna idea que se pueda implementar. El otro día ella presentó un supuesto plan alternativo de economía. Lo que pienso es que si ellos ganan y lo implementan, la Argentina va a terminar peor que Afganistán.
-�Un tipo del interior como vos vive seguro en Buenos Aires?
-Vivo en un barrio tranquilo, lo cual no implica vivir seguro. Hay robos, y el otro día, a tres cuadras, mataron al chico de 14 años. Nadie está exento de nada en Buenos Aires. No llamo a la desgracia, no pienso en lo malo. Pero tampoco digo "a mí no me va a tocar". Nadie está seguro. Por la noche, a la provincia de Buenos Aires no voy. Y si por algún motivo me toca ir, paso los semáforos en rojo. Yo sé que está mal, pero después de fijarme hacia los costados, paso en rojo. No se puede parar, lamentablemente.
-�Cuáles de las miserias que están en la sociedad te meten miedo como padre de cara a tus hijas: drogas, alcohol, desvíos sexuales?
-Mirá, yo viví solo siempre y nunca fumé un cigarro. Podés hablar de las drogas todo lo que quieras, pero es muy difícil criar a los hijos. Si les das todo se desvían porque tienen las cosas servidas en bandeja; si no le das nada, lo mismo, porque hay cosas que les faltan. A los hijos hay que hablarles sin presionarlos y darle la mejor educación posible.
-�Hay presiones para los árbitros desde el poder de AFA?
-Si con Grondona, si hablé tres veces en mi vida es mucho. Ni con el Colegio de Arbitros tenemos contactos. Sólo recibimos ordenes de la Escuela de Arbitros de la AFA. La Escuela apoya, orienta y ayuda a los jueces. No me puedo quejar: en un año me subió tres categorías.
-�Por qué lo enfrentaste a Castrilli siendo, en ese momento, un ilustre desconocido?
-Es que no era como decía Castrilli. Yo venía en ascenso, dirigiendo Nacional "B", me tocaron muchas finales y fue sin fundamento lo que dijo. Yo era un cuatro de copas y salí con un comunicado. No tocó a los "grandes" de Primera, sólo al ascenso. No sé qué le pasó en la cabeza a este señor. Pero fuimos a Tribunales y nunca aportó una prueba. Ya que él sabía todo y era tan guapo, porqué no dio los nombres de los árbitros que dirigían para tal o cual lado. A mí siempre me respetaron el estilo, que no era el mismo de él. Y nadie en AFA me dijo "che, Baldassi, si no dirigís como Castrilli no vas a llegar a ningún lado" . Yo dirigí siempre igual desde las inferiores.
-�Por qué el apodo de "Coneja"?
-íQué se yo!
-�El CD de quién no puede faltar a la hora de tu gusto musical?
-Me gustan "Los abuelos de la Nada", Charly García, Soda, Virus. Todo lo que sea rock nacional. Cuando podía, a Charly iba siempre a verlo al Gran Rex. Soy un apasionado de Charly.
-�Cómo anda tu biblioteca?
-La verdad es que leo muy poco. Me inclino por libros que te dejen algo, como "El hombre de la armadura de hierro". No me gusta las novelas, porque me distraigo mucho a la hora de leer y pierdo el hilo.
-�Cómo te llevás con Dios?
-Todos los domingos voy a misa. Espiritualmente tenemos que estar bien, y acercándome a Dios en parte lo consigo.
-�De esta crisis sólo nos saca Dios?
-Nos tienen que sacar los políticos que tengan huevos y capacidad.
-�Qué comés los días de partido?
-Lo que estás viendo: café con leche, pan, mermelada y manteca cuando se juega a las 15.30.
-�Tomás alcohol?
-Nunca o casi nunca. De todos modos, el gusto del fernet con coca que traigo desde Córdoba no me lo voy a sacar nunca. De vez en cuando, un vasito no viene mal.
-�Tenés que controlar el peso?
-Me cuido con los dulces, fundamentalmente los chocolates. Cuando llega el viernes me cuido un montón.
-Pero, �alguna vez te desordenás para darte un gusto?
-íNo sabés lo que morfo en las vacaciones! Como lo que no puedo en todo el año: huevos fritos y puchero encabezan los platos preferidos.
-Presentame la familia Baldassi.
-Mi señora se llama Belkis. Tenemos dos hijas: Julieta, de 9 años, y Luciana, de 6.
En su momento, el "Indio" Jorge Solari dijo que varios entrenadores de divisiones inferiores eran homosexuales. Y Daniel Passarella, cuando tomó la Selección en el '94, fue claro: "No hay lugar en el fútbol para jugadores homosexuales". Héctor Baldassi no le escapó a este tema en la charla con NOSOTROS en la tranquilidad del lobby del Hotel Río Grande:
- �Qué pensás de este tema?
- A pesar de que es evidente que la sociedad no está preparada, no hay que ser discriminatorio. No tengo problemas para que tengan posibilidades. El problema es que los juzga "el que dirán" de la sociedad. No se puede evaluar por el gusto sexual sino por la capacidad. No discrimino con las mujeres, las acepto en el fútbol y tampoco a los homosexuales.
- �Hablan los árbitros de estos temas entre ustedes?
- No le damos ni bolilla a ese asunto. En el tema puntual nuestro, no conozco ningún árbitro que sea homosexual, pero si lo supiera no lo diría, porque la sociedad lo condenaría al toque. Yo lo trataría igual. Mirá, te cuento algo que nunca dije: tuve un amigo homosexual y me pareció un excelente tipo...que tenía una desviación sexual, sí, pero totalmente sano en lo humano. �Sabés cuántos pensás que son machos y cuando se cierran las puertas del dormitorio no tenemos ni idea de lo que hacen en la cama?
-Hasta ahora no te mandaste una gran "macana".
-Puede ser, pero en el fútbol argentino. Aunque en el Sudamericano cometí un error enorme, ya que el gol entró por el medio del arco y yo lo anulé porque no lo vi. Y encima fue a Colombia contra Brasil. Nadie está exento de la macana, hay que estar preparado porque en cualquier momento te viene. El otro día, antes de que arranque el campeonato, dirigí un amistoso en Córdoba: Talleres-Belgrano. Vi una pelota que le pegó en la mano a un jugador y resulta que le dio en la cabeza. Me puedo conformar diciendo: "No importa, fue un amistoso". �Y si era por los puntos y de manera oficial? Cuando uno aprende, como árbitro, a convivir con el error y lo supera, es porque está madurando en esta profesión.
-�Tuviste o tenés moldes o espejos?
-Hay que ser muy inteligente para dirigir un partido de fútbol. Yo nunca traté de copiar ningún estilo. Traté de sacar lo mejor de los mejores y después incorporarlo. Lo que pasa es que a veces encaja y a veces no. Yo no puedo mostrarme como una persona seria porque no lo soy, ya que me vivo riendo. A lo mejor con una carita te puedo decir que te estoy retando o decirte "pará la mano". No hay estilo o no estilo para dirigir. La conclusión es llegar al final y saber si lo llevamos bien o no al partido. Disfruto al máximo el arbitraje. Ser alegre no es no ser serio.
-�Qué te ayudó en la profesión específicamente?
-Haber jugado al fútbol me dio algunas ventajas. Si bien no lo hice a nivel profesional, me sirvió de mucho para determinadas circunstancias de lo que es el juego.
-De todos modos, conviven con el error.
-Uno va superando los errores. Hay que tener autocrítica, poder ver las propias fallas y corregirlas. Hay que tratar de ser creíble hasta en el error. Si uno se equivocó, lo supera y no lo vuelve a cometer, y ya está.
-Creo que te sentís respetado.
-Me siento respetado y la autoridad, en parte, te la da la categoría de partidos que vas dirigiendo. Soy un agradecido: tengo 3 años en Primera y dirigí dos Boca-River oficiales y dos amistosos. Del mismo modo, todos los clásicos de Buenos Aires. Eso implica superar barreras.
-�Qué es indispensable para el Baldassi árbitro?
-La parte fundamental del árbitro pasa por su entrenamiento. Quise seguir la conducta de Elizondo, a quien le copié esa constancia. Yo entreno todos los días de mi vida. También de Loustau, Lamolina, Bava y Mastrángelo saqué otras cosas.
-�Apuntás al Mundial 2006 en Alemania, Héctor?
-No pienso ni de acá a dos años. Mis objetivos son a corto plazo. Porque después si las cosas no se dan, la frustración es muy grande. Yo no pienso en el 2006, porque hay dos o tres árbitros con más antecedentes que yo. Mi meta es el año que viene tratar de prepararme bien, tener suerte e ir a un Mundial Juvenil y tener un torneo Fifa (Sub 20 o Sub 17).
-Todo bien y muy lindo. Pero... �y la plata?
-Puedo vivir del arbitraje. Somos casi profesionales. El sueldo de un árbitro es respetable para lo que es el país. Encima, conocí muchas ciudades y otras culturas.
Darío PignataFotos: Luis Cetraro-Néstor Gallegos