Alumnos del Instituto Superior Incorporado N° 9195, Cruz Roja Argentina, realizaron un trabajo para la cátedra Enfermería Comunitaria I, en el cual hacen referencia a las características del cáncer de mama, su manifestación y su forma de prevención.
El grupo estaba integrado por Gonzalo Sánchez, Marilín Quevedo, Vanesa Ferrero, Paola Ortíz, Mauricio Leiva y Mariana Nieres, del primer año B de la carrera de Enfermería.
Explicaron que el cáncer es la multiplicación anormal de las células que invaden a los tejidos vecinos y tienden a diseminarse a puntos lejanos del organismo. Eso sucede cuando esa célula sufre un daño en el mecanismo de división, comenzando con el fraccionamiento indefinido.
Esta enfermedad se manifiesta como un bulto localizado en la glándula mamaria y es una masa de tejido anormal que crece independientemente de los tejidos circundantes, que se denomina tumor.
Respecto de este tipo de formaciones, plantearon que pueden ser malignos, cuando tienen un desarrollo rápido, invadiendo tejidos circundantes y creando nuevos focos tumorales cercanos al primitivo, y benignos, cuando su desarrollo es lento y no invade los órganos vecinos.
En otra parte del trabajo, los alumnos mencionaron que las posibilidades de contraer esta enfermedad aumentan entre las mujeres desde los 20 años hasta la menopausia, y que es más frecuente en mujeres que no han amamantado, en las que tienen menopausia tardía, las obesas y aquéllas con antecedentes familiares.
Los futuros enfermeros explicaron que como este tipo de cáncer no suele ocasionar dolor hasta en su fase más avanzada -lo cual dificulta el diagnóstico precoz- es muy importante que las mujeres se realicen periódicamente una mamografía.
Dicho estudio consiste en la exposición directa de las mamas a rayos X, de bajo voltaje, con el fin de que los tejidos blandos produzcan contrastes apreciables en la imagen. Si aparece un tumor, éste se refleja en forma de sombra, incluso las que tengan pocos milímetros de diámetro, que son difíciles de localizar al tacto.
El trabajo también hace referencia a que si el tumor es benigno -lo que se determina por medio de una biopsia- se extirpa sólo el nódulo, pero si es maligno se extirpa la mama para prevenir una expansión.
Por último, recordaba que el autoexamen de mamas es un procedimiento por el cual una mujer desde los 18 años puede detectar en la zona mamaria abultamientos que no sean comunes. Es una técnica muy fácil de aprender, que no necesita de mucho tiempo para realizarlo y debe realizarse una vez por mes, preferiblemente después de la menstruación. Permite detectar precozmente tumores y curar la enfermedad en el 98% de los casos.
Las mamas deben ser examinadas con los dedos extendidos, palpando suavemente en forma circular de adentro hacia afuera, sobre cada una de ellas, en busca de cualquier nódulo, dureza o punto doloroso. Implica los siguientes pasos: