Rafaela (Enviado especial).- Con una producción que dejó nítidas huellas de su potencial, un representativo de la Orange Free State Rugby Union, de Sudáfrica, venció anoche al Seleccionado de la Unión Santafesina de Rugby por 27 a 17, en el primer partido internacional disputado en la ciudad de Rafaela.

El escenario no pudo ser más adecuado, ya que el Club 9 de Julio también había sido anfitrión treinta y cuatro años atrás, del primer kick-off del Colegio San José, iniciando de esa forma un prolongado proceso que después de tantísimos esfuerzos, se transformó en la feliz realidad que hoy representa el CRAR para el rugby rafaelino y de la región.

Pese a que anteriormente el Club Independiente había sentado precedentes en la materia, el 11 de noviembre de 1969 representa una fecha más que acorde para aunarla con la de este 12 de febrero de 2003, que seguramente resultará inolvidable para los hombres de rugby de esa próspera región de nuestra provincia, que anoche oficiaron de eficientes y gentiles anfitriones.

Como era dable esperar, desde el inicio quedó expuesta la supremacía física de los sudafricanos, especialmente de parte de un pack de forwards durísimo y de gran tamaño, a lo que se sumó un grupo de backs potentes y veloces.

Pero además, fue dable observar que Cheetahs (denominación que recibe el seleccionado de esta región que participa de la Currie Cup, principal competencia provincial sudafricana), estaba dispuesto a ratificar en nuestro país, los antecedentes que posee en materia de estilo rugbístico.

Se trata -básicamente- de jugar dinámicamente en todo el campo de juego, en pos de aprovechar a unos backs a los que también podrían catalogarse de dúctiles, teniendo en cuenta las características del rugby sudafricano.

Obviamente, para llegar a esto, se requiere una sólida obtención, seguida de por lo menos un par de incursiones frontales de los forwards, con la finalidad de conseguir los espacios necesarios.

Sin embargo, frente a este "aluvión de bondades" estuvo la férrea y ordenada defensa santafesina. La que se fue "acomodando" con el correr de los minutos, hasta transformarse en un bastión de otra meritoria producción cumplida en el ámbito internacional.

Santa Fe tackleó con determinación y certeza, trató de cuidar las escasas pelotas conseguidas y, cuando pudo, insinuó algunos ataques bien direccionados, que en los cuarenta minutos iniciales resultaron infructuosos.

En cambio, Orange Free State denotó diversos puntos desequilibrantes, partiendo de una muy buena pareja de conductores.

El medio-scrum Kok (quizás la figura el partido) manejó "los hilos" del equipo con velocidad y precisión, involucrándose permanentemente en las fases definitorias del juego (apoyó los dos tries de la etapa).

Y el apertura Barnard estuvo tácticamente impecable: ya sea posicionando al equipo a través de profundos y precisos kicks, o bien lanzándolo en ofensiva merced a un nutrido lote de variantes.

También se lucieron el octavo Nell y los wingers Smith y Wesso, mientras que en el resto de las líneas no hubo fisuras evidentes, destacándose -por ejemplo- las sobrias performances de los locks en el line-out y los centros en materia de recursos ofensivos.

El comienzo del segundo tiempo fue altamente satisfactorio para Santa Fe, ya que a los atributos defensivos descriptos, se sumó una notoria evolución ofensiva, aferrándose a la solidez de un pack de forwards que por momentos se las ingenió para prevalecer en el mauling y en el juego por espacios reducidos.

Así se gestaron los dos únicos ensayos locales, apoyados por Matías Dalla Fontana y José Campos, tras criteriosas acciones individuales, que resultaron la continuidad de un buen movimiento colectivo -el primero- y un impecable empuje coordinado, el segundo.

Los sudafricanos reaccionaron rápidamente, conquistando el primero de los dos tries del eficiente moreno Smith, que sumado al goal de Barnard, colocó el marcador 19 a 17 a su favor, cuando se aproximaba la mitad del complemento.

El lapso de equidad se prolongó hasta que Chetahs volvió a controlar el desarrollo de las acciones, expresándolo además en el ingoal santafesino.

Los coaches locales implementaron los cambios masivos previstos (jugaron todos los convocados), pese a lo cual no decreció el entusiasmo del equipo, que se despidió con algunos movimientos colectivos que merecieron el reconocimiento del entusiasta público presente.

Sin lugar a dudas, el saldo es altamente satisfactorio, ya que fue dable observar un partido interesante, impregnado de virtudes dignas de señalar de uno u otro bando.

Si a ello se suma el hecho que se constituyó en un nuevo hito para el deporte rafaelino y que contó con un marco más que adecuado para una región que por naturaleza no está íntimamente ligada al rugby, se justifica ampliamente tal afirmación.

La confianza que la Unión Santafesina de Rugby depositó en la gente de CRAR quedó altamente retribuida, ya que el espectáculo no presentó fisuras.

Por otra parte, el consejo directivo del ente rector de nuestro rugby, manifestó su especial agradecimiento por la colaboración recibida del Gobierno de la Provincia, a través de la Dirección de Deportes y la Lotería de Santa Fe; como así también de las empresas Naran-pol, Expertur, Castelar Hotel, Benuzzi Inmobiliaria y Cervería Santa Fe.

Aunadamente, todos hicieron posible la gran fiesta que la ciudad de Rafaela, y en especial el CRAR, merecían.

El match se disputó en el club Atlético 9 de Julio de Rafaela, con el referato del entrerriano Víctor Maximiliano Rabuffeti, secundado por los santafesinos Martín Rodríguez y Alejandro Quirelli como jueces de touch.

Santa Fe alistó a: Lucas Fabaz (Gustavo Kakazú), Luciano Campos (José Negrete) y Gustavo Stieffel (Germán Córdoba); Federico Schmidt y Emiliano Dalla Fontana (Tomás Molina); Leopoldo Maillot (Alejandro Vasallo), Matías Dalla Fontana (Joaquín Reynoso) y Silvio Vicens (Juan Martín Doldán); José Campos (Marcelo Manassero) y Andrés Irigoyen (capitán, luego Juan Pablo Berardo); Ignacio Haeffeli (Hernán Solaro), Gonzalo Fernández, Diego Frenguelli (José Bonfanti), Mauro Aranda (Juan José Acuña) y Víctor Brusa (Pablo Diburzi). Coaches: Carlos Nallín y Federico Caputto.

Orange Free State a: Os du Randt (capitán, luego David Britz), Bernu Grobbelaar (Marius Mostert) y Rayno Gerber; Andre Wessels y Gerrie Britz; Bertran Johnson, Michael Vermaak y Darran Nell; Willie Kok y Conrad Barnard; Ferdi Wesso, J.P. Dutoit, Chris Kruger, Showan Smith y David Manual. Coaches: Gys Pienaar y Peet Kleynhans.

Primer tiempo: 6 minutos, try de Kok y goal de Barnard; 15, penal de Irigoyen; 31, try de Kok.

Segundo tiempo: 8, try de Matías Dalla Fontana y goal de Irigoyen; 14, try de José Campos y goal de Irigoyen; 18, try de Smith y goal de Barnard; 28, penal de Barnard; 35, try de Smith.

En la continuidad de su brevísima gira por nuestro país, el representativo de la Orange Free State Rugby Union se medirá el próximo sábado con el Club Universitario de Santa Fe, debido a la baja del Seleccionado de la Unión Rosarina, rival inicialmente adjudicado.

Será a las 19, en las instalaciones que el múltiple campeón santafesino posee en el barrio Las Delicias de nuestra capital, con entrada libre para todo público.

Para su primer partido internacional, el plantel superior del Club Universitario contará con varios refuerzos de jerarquía, entre los que se destacan el primera línea del Mendoza Rugby Club y Los Pumas, Federico Eduardo Méndez; el centro y capitán del SIC, Mariano Díaz de Vivar, y el medio-scrum de Universitario de Rosario, Magin Moliné, etc.