Pantallas y Escenarios: PAN-01

Es sólo rock and roll, pero les gusta

Mercedes Pardo. RATONES PARANOICOS. Revivieron el clásico espíritu rock argentino en el ciclo Santa Fe Rock.
La segunda fecha del Santa Fe Rock, realizado el pasado jueves en la vieja estación de trenes, distó bastante de la primera presentación del ciclo. No sólo porque los encargados de cerrar la noche eran los Ratones Paranoicos (de ahora en más RP), sino porque toda la noche se respiró un aire diferente.


Mientras que con Kapanga todo fue más festivo -casi como una kermesse barrial- con los Ratones se vivió el clásico espíritu rock argentino.

La ya acostumbrada espera con cervezas y cantitos (desde La 25 hasta Viejas Locas sonaron todos los éxitos), las banderas colgando de los árboles, los petardos reventando en la calle, el flequillo jaggeriano inmortalizado en casi todas las cabezas, mucha risa por ahí, la gente de Drogas Peligrosas (�un tanto paranoicos?) y varios clisés más. Todo dispuestos para que salgan los RP y que de una vez la llama del rock stone, clásico o chabón ilumine la noche -�alguien me puede decir, desde cuando nos gustan tanto los Rolling? �Desde la seguidilla de conciertos en River? Puede ser-.

Muchas ganas de ver a los RP parecía haber en la ciudad. Los viejos andenes se llenaron y la gente disfrutó todos los temas de Juanse y Cía.

Hace tiempo que los RP no se aseguran un par de buenas nuevas canciones. Ni siquiera se reinventaron y salieron a la carga con cambios profundos. El rito del grupo pareciera intentar ser su propia jukebox, la eterna caja de Pandora repleta de viejos hits que de alguna u otra manera, en cualquier situación, sirven para dar un buen show. Sin despeinarse, sus ratoncitos de batalla estuvieron todos. Ideal para grabar el concierto y así tener un greatest hits en vivo.

�Quieren rock?


Los encargados locales de abrir la noche fueron, en este orden, Dr. Veleta y Abril a Mil. Quizás la decisión de ese orden no fue la mejor. Sin duda, el pop guitarrero y alternativo (�existe todavía esa etiqueta para las bandas?) de los Abril tendría que haber abierto la noche y dejar que los Dr. Veleta, con ese concepto de rock nacional en sus guitarras y sus covers de Divididos y las Pelotas, cierren y dejen todo servido para los RP. Igualmente, las dos bandas sonaron prolijas, siempre es destacable el sonido del evento y entretuvieron a los que decidieron entrar un poco más temprano.

Mucho más tarde de lo previsto, los RP aparecieron por el escenario. Las canas de Roy, las botas sureñas de Sarcófago, la bocaza de Juanse, la pose del Zorrito (el clásico "tipo con onda") y todas las mañas de una banda ya legendaria. Rock en bruto tocado con justeza y precisión. Nada de sorpresas y que empiece el desfile de todos esos estribillos que ya todos conocemos, pero que siempre es bueno volver a escuchar.

Las canciones -Rock del gato, Rock del pedazo, Estrella, Perrita y todas las otras- saltaron hacia el público y fueron bien recibidas en el pogo y en los saltos mientras Juanse, levantando las manos y tirando besitos, se paraba en los parlantes y bailaba como... sí, como Jagger. Roy y Sarcófago tocaron lo que tenía que tocar y dejaron que todo pase por la presencia del Zorrito y de Juanse, rock stars de otras épocas en donde todo parecía más sucio y menos mambrunesco, para que se despunte el vicio de tocar rock and roll.

La banda se sintió cómoda arriba de un escenario bien provisto de luces y de una sencilla bandera paranoica.

Tocaron, y mucho. Hicieron sentir que sus canciones son para escuchar en vivo, Enlace y El Cowboy son canciones literalmente vivas.

Despedida y corrida por el hall entre fanáticos ansiosos por la firma de banderas y la foto obligatoria. Es sólo rock and roll, pero les gusta.

Maximiliano Lichtenstein